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2010/06/28

Estado de Nabarra. El negacionismo imperialista y otros

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. El negacionismo imperialista y los otros
Soberanía de Navarra

“Cuando al Pueblo Nabarro se le oculta o se le niega el conocimiento de su idioma nacional ”euskara” y su historia nacional la del “Estado Baskón de Nabarra” o cualquiera de las dos, a eso se le llama “nabarricidio”, es un crimen de lesa humanidad, el cual no prescribe.” Estatalistas nabarros

Esta mañana hojeando la prensa en el lugar de costumbre, trataba de ver alguna reseña en los medios de comunicación de la Nabarra Occidental, sobre lo acontecido ayer domingo día 27 en las campas de Getze (NOAIN) y en capital de nuestro Estado, Nabarra, pero “NADA de NADA” salvo una pequeña reseña en un diario de la I.A. en el resto mutis total. Debía de tener una cara muy rara porque alguien de los muy enterados y que hace gala de “abetzale”, se me ha acercado con cara de preocupado. A su pregunta de qué me pasaba, le he contestado diciéndole que desgraciadamente el colonialismo que padecemos, cuyo responsable es el imperialismo Franco-Español-Vaticanista, y por eso así nos va. El abertzale se me ha puesto muy serio, ha llamado a otros compañeros y al unísono me han contestado que lo de NOAIN es agua pasada, que hay que vivir y luchar por el presente etc., etc.; no quiero seguir más con la historia. Lo único positivo de todo esto es que me hayan prometido que entrarán en este blog y en el de NBK.

El negacionismo imperialista lo tenemos permanentemente hasta en la sopa, lo grave es que hasta los llamados abertzales practican semejante aberración y sean cómplices del mismo. Se sigue negando lo posterior a Noain, igual me equivoco, pero tengo la certeza de que para una gran parte del sector abertzale todo acabó en Noain y el futuro comenzó con Sabino Arana. Yo como baserritarra que soy, y muy pegado a la naturaleza además en proceso de descolonización acelerada, “RECALCO Y REPITO” hasta que retumben las piedras la misma cantinela. Somos el Estado Baskón de Nabarra, conquistado genocidamente por los Estados de España y Francia con la colaboración inestimable de nuestro mayor enemigo, el Estado Vaticano y sus legiones de cómplices y complicidades. Siguen con las pautas marcadas por los dos Cardenales más genocidas que conoce nuestra historia. El cardenal CISNEROS en 1512 y el cardenal RICHELIEU en 1620.

He insertado en su totalidad este artículo aclaratorio, de nuestro compatriota y estatalista nabarro Iñigo Saldise, con la finalidad de que nuestra clase política y sindical se impregnen del pensamiento renacentista y humanista que hace 500 años nuestros líderes ya lo tenían y se legislaban por el “Derecho Pirenaico”, cuyo uno de sus principios es el de “antes leyes que reyes”. No debemos olvidar que en la actualidad la inmensa mayoría de los estados se rigen por el “Derecho Romano Germánico” muy influenciado por los principios de la inquisición.

A pesar que la retirada total de las tropas del emperador Carlos I de España, de la tierra de Ultrapuertos, no ocurrió hasta el año 1530, las legítimas Cortes de Nabarra se reúnen en Donapaleu a petición de Enrique II el Sangüesino en el año 1527, llegando a ostentar esta localidad bajonabarra, la capitalidad del Reino soberano e independiente de Nabarra, cinco años después de la derrota nabarra de Amaiur.

Tras el año 1530, desde el Estado de Nabarra, libre al norte del Pirineo, se sucedieron varios intentos diplomáticos, que buscaban la recuperación de las tierras ocupadas por los españoles. En ese contexto, el rey de Nabarra, Enrique II el Sangüesino, lo intentó mediante la concertación del matrimonio de su hija, la princesa de Biana, Juana de Albret, con el hijo del emperador Carlos I de España, el príncipe de Asturias, Felipe. La perspectiva esperanzó a los nabarros sometidos del sur del Pirineo, donde incluso los beaumonteses de Iruñea, que cohabitaban en unas cortes ilegales con un Virrey extranjero, prepararon un memorandum en el año 1540, detallando claramente cuáles eran las tierras arrebatadas por los españoles, que debía reclamar el rey nabarro, además de las cinco Merindades ocupadas en su totalidad desde el año 1522:

“Quanto a lo que pertenesce a V. Alteza, según lo que solía extender este Reyno antiguamente como es pública voz y fama que era señor de Guipúzcoa, Vizcaya y Alaba y mucha parte de Rioja, hasta el holmo de Burgos; como por la sepultura que antiguamente los reyes de Navarra tenían en Nájera y otras ciudades y villas que hoy en día parescen las armas de Navarra; anssí como en Logroño y en otros lugares y de poco acá se han borrado...”

La corte nabarra y con ello la capital del Reino, es situada en Pau por Enrique II y Maragita de Nabarra, donde como en Florencia, se crearon numerosos cenáculos y academias de simbología cabalística y de hermenéutica, donde se enseñaron las artes y la filosofía neoplatónica, gracias principalmente a la labor de la reina Margarita de Nabarra, algo que no ocurrió en los territorios navarros del sur del Pirineo, donde la inquisición española realizaba auténticos estragos y los magníficos castillos habían sido destruidos por orden del cardenal español, Cisneros.

Durante el reinado de Enrique II, el Estado independiente de Nabarra vio como sus formidables fortalezas se transformaron en auténticos palacios Renacentistas y además el Reino de Nabarra era un lugar de acogía para todos los refugiados humanistas y reformistas, que eran perseguidos en el resto de Europa.

La corte humanista de Pau se llenó de escritores, filósofos, pensadores, artistas y arquitectos, siendo la reina Margarita de Navarra la mayor inspiración posible del movimiento evangelista, el cual se había asentado firmemente en el Reino de Nabarra.

Incluso la propia reina de Nabarra, considerada por muchos la primera mujer moderna en la historia de la humanidad, escribió numerosas obras literarias, entre ellas podríamos destacar Las soledades de Margarita de Nabarra, obra de teatro que se desarrolla en un contexto íntegramente pirenaico, el magistral poema Las prisiones de la Reina de Nabarra o la inacabada Heptameron, obra erótica femenina, donde incluso llega a mofarse de los defectos del macho.

No es casualidad que durante el reinado de Enrique II y Margarita de Nabarra, se escribiera el primer libro en euskara o lingua navarrorum. Esto ocurrí en el año 1545, y dicho libro lleva por título Linguae Vasconum Primitiae, siendo su autor el navarro Bernart Etxepare, elevándose así el idioma propio de Nabarra, al rango de literario.

La entrada de la Reforma en el Reino de Nabarra, donde ya se había formulado un tipo de Estado moderno, basadas sus instituciones políticas y jurídicas en el Derecho Pirenaico, fue de una manera muy equilibrada, buscando con ello principalmente, acabar con el despotismos eclesiástico, que tenía de máximo exponente al emperador del estado Vaticano de Roma, enemigo histórico de los nabarros.

Esto ocurre durante el reinado de Juana III de Nabarra, que a pesar de ser educada a la francesa, debido al secuestro que llevó a cabo su tío Francisco I de Francia, continuo y acentuó aún más si cabe, la labor Nabarrista de su madre.

Durante el reinado Juana III, el Estado de Nabarra continuó con la obra de modernización de las fortalezas, introduciéndose definitivamente la Reforma, equiparable concretamente al anglicanismo, en el Estado Pirenaico, tras fracasar unas negociaciones con el estado Vaticano, donde la reina de Nabarra, buscaba la total restitución territorial para el Reino de Nabarra, de las tierras del sur del Pirineo, ocupadas por los españoles.

Así Pau, capital del Estado Pirenaico, se convirtió en uno de los principales centros de reformistas exiliados, que se sumaban a humanistas y a renacentistas, mientras que inquisidores y jesuitas tenían prohibida su entrada al Reino de Nabarra soberano e independiente. Incluso se realiza la traducción de la Biblia al euskara por el navarro Joannes de Lizarraga tras mandato de la mismísima Juana III de Nabarra, siendo editado en el año 1571.

Este periodo de Renacimiento en el Estado Pirenaico, donde los nabarros libres cultivaron el humanismo, la igualdad y el amor por la libertad, se podría definir con una frase de un famoso autor inglés, cuyo nombre es William Shakespeare. Dicho escritor, en una de sus magistrales obras, concretamente en una del año 1594, que lleva por título Trabajos de amor perdidos , nos dejó la siguiente frase para la posteridad, la cual no se podría a ver dicho, de no existir un Estado soberano e independiente de Nabarra:

“Navarra será la admiración del Mundo”

La coronación de Enrique III de Nabarra, como rey Francia, no supuso la unión de ambos reinos, ya que Enrique III de Nabarra y IV de Francia, mantuvo la independencia de Nabarra, cuyas Cortes legítimas estaban situadas en Pau, mientras que en Donapelau aún se continúa acuñando la moneda del Reino Pirenaico.

En 1598 firma la paz de Vervins entre el reino de Francia y el reino de España, sobre el conflicto que mantenían en Flandes; el rey nabarro introduce una clausura concerniente a la anexión de las tierras del sur del Pirineo por parte española, negándose claramente en ella, a legitimar el atropello llevado a cabo por el español, Fernando II de Aragón, al cual conocemos los nabarros como el Falsario.

Ese mismo año realiza el Edicto de Nantes, donde se reconoce la libertad de religión en Francia y Nabarra, a semejanza del Manifiesto de los Gentileshombres y del Pueblo de Nabarra, realizado treinta años antes por su madre Juana III de Albret. Enrique III de Nabarra pretendía que el Edicto de Nantes se extendiera a los demás reinos europeos, legitimando el protestantismo y poniendo las bases definitivas para acabar con las guerras de religión en Europa, que en menos de un siglo habían costado millones de muertos. Esta decisión le supone una nueva excomunión a Enrique III de Nabarra y IV de Francia, por parte del emperador de Roma.

Enrique III casó en segundas nupcias con María de Médicis en el año 1600. De esta unión nacería el futuro Luis XIII de Francia, el cual no fue educado según las condiciones existentes en el Fuero nabarro, paso obligado para ostentar el título de príncipe de Biana y así acceder al trono del Reino de Nabarra, sino que recibió su educación católica en la corte francesa de Paris, de manos del Cardenal Richelieu.

El 14 de mayo del año 1610, el rey de Nabarra y Francia, era asesinado en una calle de París por un jesuita, llamado Ravaillac. A pesar de ello, el Reino Pirenaico mantuvo su intendencia hasta el año 1620, cuando Luis XIII de Francia entra a sangre y fuego en las Cortes de Pau, restaurado a continuación la religión católica en el Reino de Nabarra y prohibiendo la religión protestante en todos los reinos bajo su dominio.

Luis XIII de Francia disuelve militarmente las Cortes de Nabarra ese mismo año y realiza el decreto de unión desde las Cortes de Paris. Así el Reino de Nabarra quedaba anexionado de forma ilegítima al reino de Francia y el Nabarrismo existente en los reyes nabarros desde los tiempos de Margarita de Nabarra, era exterminado por un soberano francés, completándose así, la tarea empezada por los castellanos en el año 1054 y continuada por los españoles en los años 1512 y 1521.

Conclusión: La Casa Real de Nabarra es la heredera legítima, siendo el Ordenamiento Jurídico Internacional, tanto antiguo como moderno, de la dinastía Foix Albret últimos Reyes de Nabarra cuya territorialidad supone: Desde Atapuerca hasta Foix (Andorra) y desde Burdeos hasta el Moncayo.

2010/06/27

Estado de Nabarra. Estado y territorio

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. Estado y territorio
Soberanía de Navarra

"Es más fácil escribir diez volúmenes de principios filosóficos que poner en práctica uno solo de sus principios". León Tolstoi, Novelista ruso

Estado y territorio: El territorio no es solo concepto físico, sino que también es un concepto jurídico por la política de Estado. Por ello, uno de los aspectos más importantes que definen un Estado, es su extensión territorial y la consiguiente configuración de sus fronteras con respecto a los estados vecinos. En nuestro caso, el del Estado de Nabarra, debemos decir que ha sufrido y padecido a lo largo de los siglos, numerosas invasiones militares con sus consiguientes ocupaciones, que han significado una amputación paulatina de numerosos territorios pertenecientes al Reino de Nabarra, hasta conseguir finalmente y por manu militari, tanto españoles como franceses, que el Estado de los nabarros, haya desaparecido momentáneamente, de los mapas políticos mundiales.

Varios siglos después de estas contingencias o fatalidades, continua vigente entre los soberanistas nabarros el debate político de la territorial real de nuestro Estado, debido en gran medida a la perpetuada maquinaria colonizadora española y francesa. Esto no solo es debido a la influencia impositiva de los agentes colonizadores español y francés, sino que también al pensamiento nacionalista vasco, el cual tiene un largo periodo evolutivo extendido en la historia subyugada y sometida a los designios franco-españoles, hasta llegar al planteamiento actualmente extendido, diseñado finalmente por los hermanos Arana. Así pues, antes de presentar a los defensores del planteamiento más correcto y auténtico en materia política de territorialidad para nuestro Estado, repasaremos varias visiones del mismo dependiendo del prisma, planteamiento o enfoque, de los principales y diferentes diseños existentes en esta materia tan importante, que es la territorialidad de nuestro Estado, Nabarra.

Territorialidad bajo el prisma impositivo del colonizador

La Navarra reducida o residual: La territorialidad de la Navarra reducida o residual es aquella a la que se ha visto avocada tras la labor colonizadora e impositora realizada desde el reino de España y la república de Francia. Mientras que al norte del Pirineo ya no existe ningún territorio, que de manera “oficial” lleve el nombre de Nabarra, debido solamente a la decisión unilateral realizada por la revolucionaria asamblea nacional francesa, que tacha o elimina del vocablo oficial francés el término de Nabarra en el año 1789, pasando a anexionar así y de manera concluyente al Reino de Nabarra del norte del Pirineo, dentro de la imperial república de Francia. Por la vertiente sur del Pirineo, tras la denominada primera guerra carlista, el también residual Reino de Nabarra es eliminado y, su exiguo territorio se convierte en una mera provincia más del reino de España, la cual ha llegado a nuestros días conformada bajo imposición española como una Comunidad Foral, ciertamente muy distante del Reino soberano que en su día fue, carente de las leyes, costumbres y libertades que tuvo en el pasado, que servían a nuestros antepasados para regirse en total independencia.

Territorialidad desde panteamientos colonizados

La Nabarra de las seis Merindades: Los soberanistas nabarros que defienden políticamente esta tesis territorial para el Estado de Nabarra, toman como base los territorios que poseía el Reino de Nabarra tras la muerte de Sancho VII el Fuerte, que daba paso a la entrada de la dinastía de Champaña. Estos territorios son las cinco Merindades de Iruñea, Erriberri, Zangoza, Lizarra, Tutera y la Tierra de vascos o Ultrapuertos, que actualmente asignamos a la territorialidad de Baja Nabarra. La territorialidad de las Merindades de Iruñea, Erriberri, Zangoza y Tutera, no han sufrido ninguna variación a lo largo de la historia desde los tiempos de Sancho VII el Fuerte, pero en cambio, la Merindad de Lizarra sufrió una amputación territorial en el año 1463, con la invasión y ocupación castellana de la Belorado, Sonsierra, actual Rioja alavesa, San Vicente y de Bernedo y sus aldeas, actual montaña alavesa, que si defienden como espacio nabarro los soberanistas que apuestan decididamente por esta política territorial. A pesar de que a la Baja Nabarra nunca se le otorgó por parte real el título de Merindad, en la actualidad la conocemos como la sexta, después de las de Iruñea, a la que estaba unida real y inicialmente, Zangoza, Erriberri, Tutera y la ya comentada Lizarra, y ni siquiera su amplitud territorial a través de los siglos, es la que le damos en la actualidad. Llama la atención, un trabajo realizado por la sociedad de estudios vascos, que aparece en su revista del año 1929, el cual incluía un prólogo realizado por el redentorista nabarro Xabier Gorosterratzu, quien tradujo del latín al castellano, la obra de Arnaldo de Oyenart, titulada Noticia de las dos Vasconias, cuyo título originario es Notitia Utriusque Vasconiae, edición realizada en el año 1638. Xabier Gorosterratzu Jaunarena, biografía en anexos

En la primera página de ese importante y gran trabajo, el nacido en Urrotz, Xabier Gorosterratzu, nos realiza un pequeño, pero a la vez importantísimo apunte en materia de la territorialidad básica de la Tierra de Ultrapuertos, al situarnos dentro de ella el lugar de nacimiento de Arnaldo de Oyenart:“(…) nació en 1592, en Mauleón, población principal de la sexta Merindad del antiguo Reino de Navarra, poblada exclusivamente por vascos, que todavía conservan con cariño y tesón su maravilloso idioma primitivo. Solo dos años había que figuraba como unida a Francia y esto únicamente por la persona del rey (…)”

Los defensores de esta razón territorial, basada en las seis Merindades, a diferencia de lo que ocurre con la Merindad de Lizarra, niegan sin ningún razonamiento histórico-político y de manera insistente, que la comarca de Xiberoa, región donde está la ciudad de Maule o Mauleon, pertenezca a la Tierra de Ultrapuertos Esto es una contradicción importantísima para aquellos que defienden esta política en materia territorial, con respecto a la Merindad de Lizarra, ya de por si carente de un mayor rigor histórico-político, al obviar intencionadamente la territorialidad del Reino de Nabarra anterior al año 1200, durante los reinados de Sancho VII el Fuerte y sus antecesores; e incluso, la política territorial de los monarcas nabarros que sufrieron la invasión española del año 1512, Catalina I de Foix y Juan III de Albret, más la posterior que mantuvieron sus descendientes una vez asentada la ocupación militar española de la Alta Nabarra-las Merindades de Iruñea, Zangoza, Erriberri, Tutera y Lizarra- desde el año 1524.

Extraído del libro “NABARRA, reflexiones de un patriota” Iñigo Saldise Alda 2010

2010/06/26

Estado de Nabarra. Aclaraciones

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. Aclaraciones
Soberanía de Navarra

"Con la verdad, la legitimidad y la unión, acabaremos con la ocupación". Blas de Beaumont, regente de la Casa Real de Nabarra.

"Un hombre que se conforme con obedecer leyes Injustas y permite que le pisen el país en que nació, los hombres que se lo maltratan, no es un hombre honrado... En el mundo ha de haber cierta cantidad de luz. Cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres. Esos son los que se rebelan con fuerza terrible contra los que le roban a los pueblos su libertad, que es robarles a los hombres su decoro. En esos hombres, va un pueblo entero, va la dignidad humana." José Martí, Político, Periodista, Filósofo, Poeta, Masón y héroe de la independencia de Cuba

“La Independencia jamás se pide, se ejecuta. El derecho de Autodeterminación no se pide, se ejecuta. Un Estado no se pide, se ejecuta”. Estatalistas Nabarros

Ante la conmemoración un año más de la batalla de Noain el domingo 27 de Junio conviene aclarar que el Reino ó Estado de Nabarra no acabó con la conquista española, pues siguió como Estado libre y soberano hasta el año 1620.

Como aclaratorio del mismo he insertado unos párrafos que están escritos en el libro “Nabarra. Reflexiones de un Patriota” de nuestro compatriota y estatalista nabarro Iñigo Sadise, que dice así:

Los nabarros consiguen mantenerse soberanos al norte del Pirineo hasta el año 1620. El rey de Nabarra, Enrique II el Sangüesino, promulga en el año 1551 el Fuero de Bearne, Vizcondado éste unido al Reino Pirenaico desde el año 1484. En su Preámbulo se percibe un claro sentido democrático a la hora de la elección del soberano, siendo éste siempre posterior a las libertades del Pueblo Nabarro. Evidentemente es el logro de todo un proceso que va cogiendo fuerza tras el nuevo acceso a la Corona de Nabarra de nuevo de dinastía Pirenaicas, Foix y Albret, quizás para poder apoyarse decididamente en los Estados Generales. Dicho esbozo se comprueba con gran potencia en la crisis de la pérdida de la independencia de Nabarra. Por tanto la soberanía del rey y a la vez la del Estado y de la Nación, es sostenida principalmente por las Universidades, Comunidades vecinales, el Pueblo o Tercer Estado, en contra posición de las monarquías totalitarias vecinas de Francia y España.

El Preámbulo del Fuero de Bearne se hace referencia directa a un origen electo del soberano por el pueblo, y esto es debido a ser una consciente decisión política, que también aparece en el Fuero Antiguo del año 1234, en una obra legislativa del año 1511, incluido incluso en el Fuero Reducido del año 1528 ya bajo imposición española, y en Fuero Moderno de Nabarra del año 1645 ya bajo imposición francesa. Enrique III de Nabarra, llamado por nosotros el Bearnés, el Nabarro por los franceses antes de ser coronado como Enrique IV de Francia, siendo conocido desde entonces como el Grande, en el año 1607 dejaba bien claro en su testamento que el Reino de Nabarra pertenece a sus antepasados, la dinastía de los Albret, documento que es ocultado malintencionadamente por los franceses a la Corte soberana de Nabarra, tras ser asesinado el Bearnés por el complot franco-español-vaticanista, a través de la mano ejecutora del fanático católico, el jesuita Ravaillac.

Su hijo el delfín de Francia, Louis de Bourbon, realizada en el año 1610, mismo año de la muerte por asesinato de su padre, un comunicado en el cual presenta su renuncia para si y sus descendientes al título de príncipe de Biana, y se niega a presentar en la Corte del Reino de Nabarra, lugar donde debía ser educado para poder así poseer dicho título nabarro. Este título es un paso obligado para ser el heredero de la Corona de Nabarra desde que en el año 1432 después que lo creara Carlos III el Noble. Un año después, en el año 1611, el Cardenal Riquelieu, regente de Francia, elabora el nuevo Fuero para el Reino de Nabarra que todavía permanecía soberano al norte del Pirineo, el cual ciertamente no llega a editarse hasta el año 1645 por la resistencia frontal de los nabarros, ya que se había suprimido el previo del juramento del propio Fuero por el rey.

El Preámbulo del Fuero de Bearne del año 1551, es donde se hace referencia expresa y directa al origen electo del soberano por parte del Pueblo, y esto se realiza mediante una consciente decisión política, la cual también aparece en el Fuero Antiguo del año 1234, y en una obra legislativa del año 1511. Incluso es incluido en el Fuero Reducido del año 1528 ya bajo imposición española, y en Fuero Moderno de Nabarra del año 1645 ya bajo imposición francesa. Tanto españoles como franceses lo utilizaron como mera fórmula de control sobre los nabarros, adecuándola siempre a sus intereses imperiales.

Ya en el año 1789, el año de la revolución francesa, es cuando los Fueros de Nabarra, que aun amparaban en cierta medida los derechos de los nabarros, son eliminados por los revolucionarios franceses en beneficio de la gran Francia. El 11 de noviembre del año 1789 la Asamblea Nacional decreta que Francia sea dividida en departamentos y posteriormente, el 12 de enero del año 1790, se crea el departamento de los Bajos Pirineos, hoy conocidos como Pirineos Atlánticos, quedando así eliminado el Estado de Nabarra al norte del Pirineo, después de haber perdido a manos revolucionarias francesas su calidad de Reino, sufriendo la supresión del Parlamento de Nabarra situado en Pau y el “Derecho Pirenaico” es eliminado pese a la defensa feroz realizada durante ese periodo por el síndico Etienne de Polverel.

2010/06/25

La unidad nacional

LA UNIDAD NACIONAL
Alots Gezuraga, Errigoiti Nabarra (2010.6.21)

Muchos en nuestro país piden una unidad “abertzale” para presentarse a unas elecciones en los Estados imperialistas que nos ahogan. Debemos de unirnos, sí, pero no para presentarnos a unas elecciones amañadas donde los vascos no tenemos poder real sino puramente administrativo y condicionado a lo que los españoles nos quieren dar y mientras ellos lo crean conveniente para sus intereses, ¿qué sentido tiene buscar la aprobación del Borbón, del rey español nombrado por Franco y del parlamento que deriva de él, o del Presidente de la República francesa? Es absurdo.

¿Cuándo nos daremos cuenta de que España-Francia no son democratizables y, en todo caso, el esfuerzo no compensa? ¿Es que si lográramos que fueran democráticas querríamos seguir en ellas? Lo que está claro es que españoles y franceses están muy a gusto tal y como están.

“Un régimen democrático sólo puede constituirse sobre los derechos fundamentales. No hay democracia donde no hay derechos, y no hay derechos donde falta el derecho de autodeterminación de los pueblos, primero de los derechos humanos y condición previa de los demás. El derecho de Nlibertad, libre disposición o autodeterminación de todos los pueblos es el derecho de independencia incondicional e inmediata frente al imperialismo (…) La historia nos enseña que nuestra lucha continua por la libertad ha sido la lucha por la recuperación de la estatalidad que el nacionalismo español y el francés han pretendido aniquilar”

Joseba Ariznabarreta

¿Cómo no nos damos cuenta de que nuestro Estado, aquél que nos dimos en libertad, está invadido y que participar en las estructuras-elecciones que nos ofrece el enemigo no nos conduce más que a nuestra desaparición como pueblo, además de ser una traición a todos nuestros antepasados que lucharon por que hoy existamos?

Si somos capaces de unirnos entorno a la recuperación de nuestra estatalidad, debemos de proclamar nuestro Estado acto seguido y saliendo en masa a la calle, crear nuestro gobierno provisional, fruto de las diferentes fuerzas de las diferentes opciones de concepción del Estado que haya en nuestro pueblo en ese momento.

Basta ya de caer en un engaño tan fácil, el Estado vasco será lo que quieran los vascos en su conjunto, de izquierdas-centro-derechas, laico-católico-protestante-agnóstico-ateo-pagano, monárquico-republicano-presidencialista o lo que sea, pero debemos de elegirlo en libertad, tras expulsar al enemigo de nuestra madre tierra.

Cómo unir todas las fuerzas libertarias para recuperar nuestro Estado es la única discusión política que nos conviene tener como pueblo, el único condicionamiento aceptable es que sea un proceso democrático.



“PRO LIBERTATE PATRIA GENS LIBERA STATE; POR LA LIBERTAD DE LA PATRIA,

NABARROS, NO PERMITAIS NUNCA QUE LA LLAMA DE LA LIBERTAD SE EXTINGA EN EL INTERIOR DE UNA SOLA CASA, DE UN SOLO PECHO NABARRO.”

Hondarribia 2002, Orreaga Iritzi Taldea

Comunicado de la Casa Real de Nabarra


2010/06/23

Estado de Nabarra. El nabarricidio integral

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. El nabarricidio integral
Soberanía de Navarra

El nabarricidio integral: El imperialismo Franco-Español-Vaticanista, una vez conquistado genocidamente el Estado Baskón de Nabarra, se lanzó a tumba abierta a la labor de colonizar, alienar y practicar el negacionismo más cutre, por la vía de la santa inquisición, para completar la faena implantó el NACIONICIDIO Y LINGÜICIDIO el más atroz de Europa, y que en pleno siglo XXI se sigue practicando totalmente reactualizado.

Conviene aclarar en que consiste el NACIONICIDIO Y LINGÚICIDIO por la razón que son palabras o términos no lo suficientemente clarificados pero en nuestro caso como nabarros y además, son de vital importancia.

NACIONICIDIO Y LINGÜICIDIO: Las palabras nacionicidio y lingüicidio son consecuencia de hechos previos, como son las conquistas. Después de las conquistas surgen esos efectos. El efecto del nacionicidio, que es continuado en el tiempo, consiste en la privación a una sociedad de sus instituciones jurídicas y políticas, de su organización, de todo su entramado normativo, que le sirve para poder funcionar como una sociedad civilizada y que son además instituciones propias, surgidas de esa realidad ciudadana. Es un concepto que se utiliza universalmente cuando a un pueblo se le priva de sus instituciones jurídicas: eso es un nacionicidio. Etnicidio, sería la privación de su cultura y genocidio la eliminación de las personas.

Lingüicidio es la sustitución lingüística; cuando esta sustitución se ha buscado a través de instrumentos que pueden ser desde el desprestigio, hasta el conseguir que la lengua que va a sustituir a la propia tenga una situación privilegiada, y que la administración pública y la enseñanza impuestas, favorezcan esa sustitución.

Para corroborar todo lo descrito voy a transcribir literalmente un documento extraordinario que me lo ha enviado una compatriota estatalista Nabarra que vive en la diáspora. Lo que se describe ha ocurrido indistintamente en los territorios Nabarros, situados bajo la dominación francesa y española.

Año 1730 “Y que no les permitan hablar en vascuence sino en castellano, poniendo anillo y castigaándoles como se merecen”
Año 1766 “Prohibido publicar en euskara en hegoalde.”
Año 1768 “Prohibido en la escuela”
Año 1772 “Prohibido en libros de contabilidad.”
Año 1784 “Dará orden estricta de que nunca hablen entre sí el vascuence, sino el castellano (…) apercibiendo y castigando directamente”
Año1787 “Que no permita a los niños hablen dentro NI FUERA de la escuela otro idioma que el castellano (…) aplique la pena de azotes”.
Año 1794 “Seis meses de prisión y destitución al funcionario que use el euskara”
Año 1794 “L´enseignement se fera en langue francaise”
Año 1796 “Employer tous les moyens pour y introduire l´ usage de la langue francaise”
Año 1801 “Prohibido el teatro en euskara”
Año 1803 “J.A. Mogel denuncia “azotes como a esclavos” por hablar en euskara”
Año 1819 “… aider a la pénetration de la langue francaise en Pays Basque”
Año 1846 “Nos écoles au Pays Basque ont particulierement pour objet de substitruir la langue francaise au Basque” (Pirinio apaletako prefectac)
Año 1857 “El euskara excluido de la enseñanza pública”
Año 1862 “Prohibido en las escrituras públicas”
Año 1867 “Prohibido en el teatro (otra vez)
Año 1891 “Quisiéramos un Gobierno que prohibiese los Juegos Florales, que no permitiera la literatura Regionalista y acabara con todos los dialectos y todas las lenguas diferentes de la nacional” (Revista del PSOE La lucha de clases)
Año1901 “Dentro del recinto de la escuela, no cabe la enseñanza de ninguna asignatura en idioma distinto del español “(Gobernador Civil de Nafarroa)
Año 1901 “No caben en nuestro viejo idioma pensamientos modernos” (Pío Baroja. Antiguo bobo)
Año 1902 “Expulsión de maestros que enseñen alguna materia en euskara”
Año 1905 “El vascuence se muere sin remedio. Se muere y se debe morir” (Miguel Unamuno, listo muerto)
Año 1909 “Lo hablan de manera detestable (…) hay que romper los moldes estrechos de la lengua vasca (…) hacer funerales solemnes enterrandolos santamente” (PSOE en su revista La lucha de clases)
Año 1910 “Hacerles desistir de sus depravados propósitos (de bautizar en euskara) (Obispo de Gasteiz)
Año 1910 “Para el reforzamiento de los lazos entre el Pais Vasco y España, el euskara debe obligatoriamente desaparecer, para los socialitas españoles la lengua vasca no tiene lugar en la sociedad moderna” ( PSOE) Socialimperialismo ortodoxo
Año 1915 “Excluido del registro hipotecario”
Año 1918 “Apeaos de mi mula (…) no tenemos más cultura que la cultura hispana, la quien nos ha prestado Castilla” (Madinabeitia PSOE en El Liberal)
Año1019 “Ni en Cataluña ni en el País Vasco se ha opuesto nunca nadie a que se hable y se escriba el idioma Regional” (Pío Baroja)
Año 1923 “Actos oficiales sólo se permite el castellano”
Año 1924 “Real orden para inspeccionar a los maestros que enseñen en euskara”
Año 1925 “Retirada de libros no escritos en castellano”
Año 1925 “Dada la impotencia de amoldar a los pueblos anexionados a nuestros usos y costumbres, no hay que pueda construir más a ello que haciéndolo de manera que los niños aprendan la lengua francesa” (A.de Monzie, Ministro de Instrucción Pública)
Año 1926 “Decretos para expulsar maestros y cesar escuelas que impartan en euskara”
Año 1931 “Art. 4º El castellano es el idioma oficial de la república”
Año 1931 “Art. 5º Es obligatorio el estudio de la lengua castellana y ésta se utilizará también como instrumento de enseñanza.
Año 1931 “Nos parece un gravísimo error el querer elevar el vasco a la categoría de lengua académica y cultural. Ni lo es ni lo será jamás, porque la pobreza de su léxico lo impide” (PSOE, delegado de Nafarroa)
Año 1936 “Se prohíbe la palabra “agur” (Bando del Comandante Militar en Lizarra)
Año 1936 “Tampoco pretendemos hacer una campaña contra el vascuence, aunque no renunciamos a emprenderla (…) Nos conformamos con que se manden suprimir los letreros eusquéricos” (El Diario Vasco)
Año 1936 “Prohibido letreros, carteles y anuncios con K, TX y B.”
Año 1937 “Detenciones y multas por hablar en euskara en la calle”
Año 1938 “Prohibido tener nombre vasco”
Año 1939 “Pensar como Franco, sentir como Franco, que hablando, naturalmente, el idioma nacional, ha impuesto su Victoria” (La Vanguardia Española)
Año 1072 “ Il n´y a pas de placer pour les langhes et cultures régionales dans une France destinée á marquer
I´ Europe de son sceur ( G.Pompidou )
Año 1978 Art. 2º “El castellano es la lengua española oficial del Estado” Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho de usarla ( Espainiar Konstituzioa)
Año 1982 Art. 9 “El castellano es la lengua oficial de Navarra”

Conclusión:

a) Una vez leído este trabajo el proceso de descolonización en mi persona se ha acelerado en 10G
b) Cada vez que oigo alguna referencia a la 3º república española y las bondades de la izquierda española ó francesa y si pensamos que esos son nuestros amigos, solo cabe decir VIVA los enemigos
c) Recordando aquella famosa frase de un político catalán anterior al golpe franquista: “Lo más parecido a un español de derechas es un español de izquierdas” yo añadiría el siguiente paralelismo que le viene al pelo al Caso de Nabarra y además, es muchos más real: “Lo más parecido a un español ó francés de derechas es un español ó francés de izquierdas”.

2010/06/22

Iruinea, junio de 2010

Iñigo Saldise Alda
Hay que botarles de Nabarra
Soberanía de Nabarra

“Francia es una república indivisible, laica, democrática y social”. Artículo 1º de la constitución de la república de Francia.

“El ejército es el garante de la unidad indivisible de España”. Artículo 8º de la constitución del reino de España.

La perenne y constante coacción impositiva franco-española hacia la Nación Nabarra, más o menos con carácter violento ejercida desde el preciso instante la las diferentes invasiones sin previas declaraciones de guerra, supremacía de número, conquista con genocidio y colonización, está claramente perfilada y presente en las constituciones de ambos estado, los cuales uno conformado en forma de reino y el otro en forma de república. Ambos estados imperialistas y colonizadores, intenten esconder bajo un falso estado de derecho y una ciertamente inexistente democracia, la posibilidad de que el Pueblo o Nación más antiguo de Europa, vuelva a recuperar la libertad que le fue arrebatada de forma exclusiva, por la violencia de las armas de los ejércitos español y francés.

El perpetuado y falso mensaje democrático emanado desde la república francesa y desde el reino español para el Pueblo nabarro, actualmente bajo el triste y nefasto rango político de Pueblo colonial, se basa únicamente en continuadas y falsas promesas de democracia, autonomía o autogobierno, es decir, en un inexistente derecho a poder elegir a nuestros gobernantes, ya que finalmente estos, son los que se encuentran en las metrópolis de dichos imperios, el francés y el español. La colonización está tan metida en las mentes de esta Nación tras más de 500 años de colonización, que incluso dentro del Movimiento Independentista o Soberanista Nabarro, tienen fe ciega en la concurrencia a unas elecciones dentro de los estados colonialistas francés y español, desde donde utópicamente nuestro Pueblo o Nación milenaria alcanzará de nuevo la libertad.

La correcta violencia política, basada esta en la clara correlación de fuerzas, evidentemente es totalmente estéril dentro del marco imperial planteado por el reino de España y por la república de Francia. La Nación Nabarra es inferior en número a la nación española y francesa, incluso sin sumar a estas últimas, aunque tengámoslo presente, son serios aliados en su imposición militar, política, policial, económica, cultural y lingüística hacia la última colonia europea que poseen. Cualquier miembro de este Pueblo, que con su ejercicio del voto ante la llamada de las urnas realizadas por el rey de España o el presidente de la república de Francia, debe tener presente que está legitimando la esclavitud de la Nación Nabarra, a la que finalmente pertenece.

Nosotros, los nabarros y nabarras, de manera individual, debemos comenzar un claro ejercicio de descolonización mental. Para ello es imprescindible el conocimiento de la historia de este País, del Estado que los representó y cobijó, el cual estuvo constituido como Reino a semejanza de los que le rodearon en su día, cuyo nombre era Nabarra y sirvió sin ningún tipo de duda, para la subsistencia de nuestro Pueblo, de nuestra Nación. Así, teniendo esto presente, demostrando el Humanismo que hizo que nuestro Estado fuera vaticinado como la maravilla del Mundo, nuestra obligación patriótica es la de botar a las instituciones impositivas y colonizadoras franco-española, siendo esto solamente posible mediante al recuperación del Parlamento independiente y soberano de Nabarra, junto a un gobierno provisional, que agrupe al amplio abanico ideológico existente la hermosa Baskonia, pues solo de esa manera, funcionaremos de forma autónoma, independiente y soberana.

2010/06/19

Iruinea, junio de 2010

Iñigo Saldise Alda
El trance del colonizado
Soberanía de Navarra

Hoy día, una vez más en los antiguos territorios del Reino o Estado de Nabarra, debe plantearse la deuda histórica de aquellos que se amarraron las cadenas políticas impuestas desde España y Francia, con el beneplácito colaborador del imperio Vaticano, que han facilitado y colaborado a lo largo de los siglos hasta la actualidad, en el hurto continuado de la riqueza nacional Nabarra. Son pocas las rebeldías que debemos y podemos animar los estatalistas nabarros y nabarras, pero ha decir verdad son muchos compromisos pendientes que acarrea el pueblo más antiguo de Europa. Debemos tener presente todos los soberanistas nabarros y nabarras, que si el y la ex colonizada consiente, si de nuevo realmente se degrada, ya no será un hombre o mujer, porque la vergüenza y el miedo lo deshonrarán y dejará su condición nabarra, a la par que renunciará a la auténtica condición humana.

Si ciertamente la colonización avanza es gracias a la falta de una capacidad de resistencia auténtica. Los españoles y franceses no solo extirparon la libertad de la Nación Nabarra, sino que ciertamente esclavizaron a todos los nabarros y nabarras. Hoy día, todas las naciones o estados del mundo, sin excepción alguna, bien por sistema estatal, ideología política, económica o religiosa, son déspotamente cómplices de la labor imperialistas franco-española-vaticanista. La violencia ejercida por el bloque franco-español-vaticanista de manera continuada contra el Pueblo Nabarro, nunca ha sido criticada abiertamente por los demás países del mundo.

Hay que decir que pueden mejorar las heridas que la propia colonización causó, teniendo presente que nunca sanaran completamente, pero que por eso justamente, debemos canalizar que el animadversión hacia los agentes imperialistas y colonizadores del triunvirato franco-español-vaticanista, pues políticamente hablando, nuestro mayor tesoro reside en nuestros compatriotas colonizados. No cabe duda la franqueza y realidad de las palabras comentadas por Frantz Fanon. Este psiquiatra puertorriqueño afirmó: “El colonialismo vacía el cerebro del colonizado de toda forma y contenido, desvaloriza su historia y sus tradiciones, y siembra la noción que la ausencia del colono será la causa de un retorno a la barbarie, de la animalización y el encanallamiento del colonizado”. Algo que se demuestra en la actualidad con todos los portadores de las banderas española, la francesa y la católica apostólica y romana.

Los diferentes agentes colonizadores tienen muy claro que el papel de la violencia militar, tanto física como política, junto a la perpetuada imposición de las diferentes culturas y lenguas imperiales, es la vía con la cual frenar las diferentes luchas, equivocadas o no, de liberación nacional de Nabarra. Por ello, todos los soberanistas nabarros y nabarras, tenemos que optar por una actitud altamente contrarrevolucionaria. La recuperación de la plena soberanía del Estado de Nabarra, debe contar y disfrutar de una prioridad indudablemente absoluta, esa es la única tesis que debemos seguir.

Siendo el colonialismo una prolongación expresa de los estados imperialistas español y francés, amparados dichos estado por el medieval y retrogrado estado católico del Vaticano, la unitaria y correcta lucha de los patriotas nabarros y nabarras haría posible desaparecer, más o menos a corto, medio o largo plazo, el colonialismo que sufrimos los nabarros y nabarras en todos los territorios del Estado de Nabarra, uno de los más antiguos de Europa.


El Frente Patriótico de Nabarra debe aglutinar tanto a monárquicos como a republicanos, tanto a la izquierda como a la derecha pasando por el centro, sin esclusiones. Es necesario y obligado por el bien de nuestra amada Patria Nabarra, el aparcar las diferentes pretensiones personales y partidistas por el bien común, por el bien de nuestra Nación. Incluso estamos obligados a buscar el entendimiento con nuestros compatriotas que tristemente permanecen colonizados, facilitando así su imprescindible trance a planteamientos patrióticos y soberanistas; aglutinando con ello las fuerzas suficientes con las cuales ejercer la violencia política necesaria para nuestra emancipación y con ello poder realmente afirmar que hemos alcanzado la libertad.

Nabarros, nabarras, nuestro histórico humanismo nos indica que la fraternidad patriótica y combativa, tengámoslo siempre presente, debe ser nuestra principal arma para acabar con el colonialismo franco-español-vaticanista y sinceramente, se obliga a ser nuestro único referente. Jamás habrá libertad para el Pueblo Nabarro mientras no sean liberadas las mentes de nuestros conciudadanos, pues definitivamente son nuestros compatriotas.

Nuestra compromiso debe ser el de ayudar a estas personas que lamentablemente continúan colonizadas, para que así superen el inevitable e irremediable trance de la descolonización mental. Con ella llegara la descolonización histórica, política, cultural, económica y lingüística, abrir la puerta a la agrupación de las diferentes fuerzas y tendencias políticas englobadas en el movimiento de liberación, siempre entroncando al exclusivo patriotismo nabarro, facilitando la creación de un gobierno propio y plural, haciendo oír como una sola voz el grito libertario del Pueblo Nabarro ante las diferentes instancias y organismos internaciones, siendo con ello la totalidad de esta Nación, la que clame por la recuperación de la plena soberanía del Estado de Nabarra.

2010/06/17

Estado de Nabarra. El progresismo real

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. El progresismo real
Soberanía de Navarra

“Un pueblo educado, sabrá elegir a dirigentes honestos, y competentes. Estos elegirán los mejores asesores.”
“Un pueblo inteligente, y educado no permite corruptos ni incompetentes.”
“Un pueblo ignorante, desperdicia sus recursos y se empobrece.”
“Un pueblo ignorante, vive de ilusiones.”
“Un pueblo educado, sabe muy bien diferenciar un discurso serio, de una prédica demagógica.”
“Un pueblo educado, prospera también en condiciones adversas.”
“Un pueblo ignorante, es terreno abonado para la demagogia.”

Tarja Halonen, Presidenta de la República de Finlandia

“La libertad nacional es el primero de los derechos humanos y la condición de todos los demás. El imperialismo es especie de totalitarismo.” Erresuma

El progresismo real, es ciertamente la antítesis de lo que en la actualidad practican los partidos y sindicatos llamados “abertzales”.Toda su estrategia está basada en gestionar las migajas que les da el imperialismo franco-español-vaticanista. Es muy importante saber lo que fuimos antes de ser conquistados genocidamente por el triunvirato imperialista franco-español-vaticanista, con la brutal posterior colonización, alienación y negacionismo de la realidad de la Nación Nabarra. No se ha tenido en cuenta para nada el binomio “Idioma nacional +Historia nacional”. En esas seguimos y tristemente hay que decirlo, así nos va todo. Esto se refleja en la clase política y sindical denominada autóctona, con todo lo que está cayendo y lo único que realmente están haciendo es poner paños calientes y apuntalar las instituciones de los imperios español y francés. En esa labor está inmersa, con diferentes matices, todo el espectro abertzale incluido los “revolucionarios” de la lucha armada. Estos últimos han conseguido que la república de Francia y la monarquía española sean legitimadas dueñas de nuestro territorio en Europa y el Mundo, para así poder actuar impunemente en contra de la recuperación de nuestra “SOBERANIA”, de nuestra territorialidad y de nuestro Estado de Nabarra.

El progresismo real, es el tomar en cuenta lo que refleja este texto realizado por un estatalista nabarro. Cuando la opresión, degradación y humillación se amplíen en lógica correspondencia, cuando la represión se desmadre sobre un País reducido a la resistencia espontánea, cuando los circuitos de propaganda fascista a escala mundial arrojen la difamación y el descrédito sobre un pueblo amordazado, que el elector “vasco”, recuerde que él legitima, financia y aprovisiona con sus votos la estrategia, los agentes y las armas de la nueva “democracia española”.

El progresismo real, es el referente del Paradigma Nabarro y la legislación absoluta del Derecho Pirenaico-“antes leyes que reyes”-y el contenido de este magnífico artículo realizado por nuestro compatriota Antonio Urra Maeztu.

EL florecimiento de las ciencias y de las artes comenzó en Navarra con Carlos III el Noble, continuó con el Príncipe de Viana y, sobre todo, brilló con la trilogía de Margarita de Navarra, Juana de Albret y Margarita Valois. Llegó a decirse en otras cortes que en Navarra las mujeres llevaban los pantalones. Aquí no existía la Ley Sálica, y las mujeres tuvieron más importancia que en otros reinos.

No es exacto afirmar que el Reino de Navarra terminó con la invasión de 1512. ¿Se piensa así también al celebrar el 5º centenario en 2012? Los reyes de Navarra continuaron en la Baja Navarra, en la corte de Pau, un siglo más hasta Luis XIII. Los españoles, al referirse a los reyes navarros y a todos los que tenían cualquier relación con la Baja Navarra, creían insultarlos llamándoles franceses.

La Navarra de la corte de Pau destacó por la cultura de un reino que maravilló a Europa. Ni España, ni Francia, ni la Iglesia, soportaban la transición de una Navarra medieval a otra más moderna. La tolerancia de los monarcas navarros se interpretó como herejía. Para los papas y para Francia y España, lo correcto era la intransigencia, la intolerancia y la más cruel Inquisición, rechazaban cualquier aperturismo por parte del Reino de Navarra. En nombre de la religión, condenaban a la hoguera a la intelectualidad europea. Nunca la Iglesia ha aceptado la modernidad, ni ahora ni en los siglos XV y XVI. Aunque Navarra no llegó a romper con el papado, sí que fue partidaria de reformar los abusos de la Iglesia, por ello los Reyes de Navarra fueron acusados de herejes.

En esa época, nuestros reyes recibieron una educación refinada en todas las disciplinas. El Príncipe de Viana escribió una Historia de Navarra, su manuscrito se conserva en la Biblioteca británica. Margarita de Navarra fue autora de varias obras como los cuentos Heptamerón, el poema de Las prisiones de la Reina de Navarra, El Inquisidor y algunas más; se le llamó la primera mujer moderna, estudió la filosofía neoplatónica de moda en la época, fue la quintaesencia del Humanismo y del Renacimiento. Juana de Albret creó también en su corte grupos humanísticos que algunos llamaron abadías laicas y la Inquisición española quiso quemarla en la hoguera. Margarita de Valois continuó con la labor humanística y defendió la unidad de las dos navarras, sus
territorios y sus instituciones.

Promocionaron el euskera: Jon de Leizarraga que tradujo Jesus Crist gure Jaunaren Testamentu Berria. Bernard Etxepare escribió Poesías vascas.

He recogido aquí sólo unos retazos de una historia de Navarra del siglo XV y, sobre todo, del XVI, historia rica aunque muy turbulenta. Los reyes navarros fueron envidiados por la intelectualidad europea. Navarra fue enaltecida por el mismo Shakespeare, parece que estuvo en el Reino, quien afirmó: "Navarra será la admiración del mundo". Es una época muy poco estudiada y que, intencionadamente, se nos ha hecho ignorar. Navarra fue en este tiempo la nación más culta de Europa.

Distintos son nuestros dirigentes de hoy y, claro, nadie da lo que no tiene. Según un estudio muy reciente, Navarra está en la cola de la cultura de la nación.

No hace mucho estuve viendo un programa en el primer canal de la TV en euskara en la que se daba un reportaje sobre las relaciones existentes a nivel de la enseñanza entre una universidad del Noroeste de Nabarra y una de Finlandia, según comentaba el interlocutor, le experiencia esta siendo muy satisfactoria. Esta experiencia como Estado Baskón de Nabarra podría ser de un efecto exponencial, a todos los niveles.

Estado de Nabarra. La importancia de la historia

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. La importancia de la historia
Soberanía de Navarra

“La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa.” Albert Einstein, uno de los científicos más conocidos y transcendentes del siglo XX


He oído a muchas personas decir que son muy patrióticas y que aman a este País o a sus tierras, pero realmente ni siquiera conocen la historia política de nuestro Estado. Para comprender el lamentable presente en el cual vivimos y proyectarnos con alguna esperanza hacia el futuro, es necesario que los nabarros comprendamos realmente el pasado de nuestro Estado. Es increíble como el estudio de la historia te revela la raíz de la mayoría de los problemas que vivimos hoy en día en el mundo; la vida es cíclica, las cosas tienden a repetirse, cambiando de forma, pero reteniendo el fondo. El estudio de la historia nos permite aprender del pasado y apreciar todo lo que hay detrás de lo que aún tenemos y hacemos. La importancia de la larga historia de nuestro Estado, el Reino de Nabarra, es mucho mayor de la que se creen ciertas personas, ya que no solo facilita nuestro conocimiento de nuestros antepasados, sino que ciertamente nos ayuda a comprender el porque de la triste situación actual de sometimiento.

Nuestra historia política estatal nos demuestra la alargada presencia del Reino de Nabarra en los diferentes foros europeos de la época, con la firma de diferentes Tratados fronterizos y el incumplimiento de los mismos por parte de los agresivos reinos vecinos, al realizar estos estados colindantes diferentes invasiones militares, todas ellas sin previas declaraciones de guerra, con la consiguiente y posterior ocupación marcial del territorio nabarro, sumada a la nefasta, al menos para nosotros los estatalistas y soberanistas nabarros, conquista con genocidio y la consiguiente brutal colonización. Muchos de los seudo políticos existentes en este País, prestan muy poca o ninguna atención a la historia del Reino de Nabarra. Tal vez motivados por la irrupción del paradigma aranista a finales del siglo XIX o tal vez por continuar con el paradigma foral. En ambos casos basados en una errónea interpretación de la Historia de nuestro Estado, bien por desconocimiento, vergüenza o intereses personales de agentes altamente colonizados; incluso estos últimos manipulan la realidad histórica buscando el exclusivo beneficio de su imperio, bien español o francés. A todos ellos les podemos aplicar la frase de un importante político inglés del siglo XX, Sir Winston Churchill, pues él ya lo dijo bien claro, “El político que ignore la historia puede ir dedicándose a cualquier otra cosa, no a la Política”.

Ciertamente, a comienzos del siglo XXI, numerosos son los investigadores e historiadores oriundos del País, los cuales están realizando una intensa e importantísima labor, para dar a conocer a la sociedad nabarra, la verdadera historia política de nuestro Estado. A pesar de todos sus esfuerzos y aunque a veces aparenten lo contrario, la totalidad de los seudo políticos que cohabitan junto al Pueblo Nabarro este País, hacen indiscutiblemente oídos sordos a estas valiosas enseñanzas, lo que les privará de la sabiduría necesaria que viene con un conocimiento claro de la historia, por causa y efecto, estando continuamente destinados a repetir los horribles errores del pasado en materia patriótica o soberanista.

A través del análisis de la historia se crea identidad y se hace conciencia, es decir, implica una nueva forma de pensar y reaccionar ante determinadas situaciones que se nos presentan. La identidad social define a un pueblo en su forma de ser y hacer, no solo en el presente, sino viendo su recorrido a lo lago de la historia, por ello desde las metrópolis imperialistas española y francesa, se intenta ocultar, desvirtuar y falsear nuestra historia, buscando imponer su historiografía con el colofón y exclusivo final de justificar, esconder, falsear o incluso vender, sus continuas invasiones, ocupaciones, conquistas con genocidio y colonización.

Nuestra ignorancia en materia histórico-política, beneficia en gran medida las labores colonizadoras del reino de España y la república de Francia, ya que nos lleva aún continuo equivoco en la toma de decisiones, pues como bien dijo Helmunt Kohl, “Un pueblo que no conoce su historia no puede comprender el presente ni construir el porvenir”. Por ello, la enseñanza de esta importante materia, está controlada por las metrópolis, alienando al Pueblo Nabarro desde las escuelas, al falsear reiteradamente la realidad histórico-política de nuestro Estado y su territorio.

Extraído del libro “NABARRA, reflexiones de un patriota” Iñigo Saldise Alda 2010

2010/06/16

Iruñea, junio de 2010

Iñigo Saldise Alda
Noain: honor, homenaje, tristeza y vergüenza
Soberanía de Navarra

A las dos de la tarde del 30 de junio del año 1521, las patrióticas tropas nabarras formadas por algo más de 5.000 hombres, capitaneadas por el joven señor de Asparrots, se enfrentaron valientemente y en campo abierto, a un numeroso contingente de tropas españolas, las cuales, les superaban más de tres veces en número, además de contar en sus filas con varios señores traidores, ciertamente desertores de su condición nacional nabarra. La batalla fue larga y muy sangrienta, cayendo finalmente la victoria del lado del invasor español, gracias primordialmente al trabajo realizado por su artillería, numerosa y superior a la nabarra. Al anochecer más de 5.000 patriotas nabarros yacían tendidos muertos tras la cruenta batalla en los campos comprendidos entre Ezkirotz, Noain y Barbatain. Tras la batalla, los españoles encargan al desertor nabarro y nuevo español, Francés de Beaumont, la tarea de hacer rendir de nuevo Iruñea, otorgándole sin ningún tipo de cautela y escrúpulo, el poder necesario para conseguir dicho objetivo militar.

A pesar de la continuidad independiente y soberana del Reino o Estado de Nabarra al norte del Pirineo hasta el año 1620, la libertad de los vasco(ne)s surpirenaicos ese día llegó a su fin. Para nosotros, los estatalistas nabarros y nabarras de hoy, es un honor recordar el valor patriótico de los leales nabarros que dieron su vida por la libertad de la Nación Nabarra. Un recuerdo que permanece muy presente y vivo en nuestro recuerdo hoy, en nuestra memoria histórica, obligándonos a mantener en pleno año 2010, su querella vigente para la recuperación de la plena soberanía para el Estado vasco(n) y la libertad de la Nación Nabarra. Para nosotros los soberanistas nabarros y nabarras, nos avergüenza que muchos de nuestros compatriotas, hombres y mujeres, no conozcan lo sucedido ese fatídico día de año 1521 y su principal consecuencia, la actual falta de libertad para los nabarros. A pesar de la actual y más que meritoria labor de la empresa Nabarralde, S.L. la sociedad nabarra continua narcotizada por la labor colonizadora del reino de España y la república de Francia. Pero lo que es una auténtica vergüenza para los patriotas nabarros y nabarras, es la ocultación de este importantísimo acto por medio de los actuales (falsos) gobernantes de la Comunidad Foral (y española) de Navarra.

Una ocultación clara y ciertamente premeditada, buscando únicamente mantener el actual sometimiento y subordinación del Pueblo Nabarro. Un sometimiento militar, político, económico, religioso, lingüístico y cultural continuado, con el claro objetivo de colonizar totalmente a los nabarros y nabarras que aún mantenemos nuestro espíritu libre y nuestra mente descolonizada. Aunque estos agentes imperialistas y colonizadores intenten ocultar nuestro trabajo continuado y libertario, nosotros y nosotras seguimos recordando a nuestros antepasados, aquellos y aquellas que físicamente conocieron la auténtica autonomía, la efectiva independencia y lo que ello significa. Aunque esos denominados navarreros menosprecien la acción de nuestros bravos antepasados, deben saber que su lucha no fue en balde. Ciertamente, no hay ninguna duda, son un ejemplo para todos nosotros, los nabarros y nabarras, por eso debemos recordarles, hay que honrarles y por supuesto nos forzamos a mantener viva su memoria para las generaciones venideras, a través de un verdadero esfuerzo libertario desde unos actos innegablemente independientes y una actitud soberana ante los imperios impositores colonizadores del reino de España y la república de Francia.

2010/06/14

Estado de Nabarra. Peseteros, hojalateros y abertzales

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. Peseteros, hojalateros y abertzales
Soberanía de Navarra

“España, país de creyentes, de seguidores de Tertuliano, cuna de los padres de la Iglesia y martillo de herejes ya sentenció «credo quia absurdum» (creo porque es absurdo). En su lucha contra los filósofos afirmó: «Creemos, y no deseamos nada más allá de la fe». Razón y Fe se mostraron siempre como antagonistas.” Autor anónimo

El pasado nos enseña como hay que actuar en el futuro, por ello la historia es tan fundamental. El imperialismo lo primero que trata siempre es el de extirpar todo el imaginario autóctono “historia, idioma, costumbres y idiosincrasia” En una palabra “COLONIZACIÓN” llegando incluso a que neguemos y reneguemos de nuestro ser como sujetos políticos nabarros.

Como anteriormente he indicado la importancia de la historia es fundamental y prueba de ello es este artículo de un estatalista nabarro que hurgando en mis papeles he localizado, los hechos se desarrollaron durante el siglo XVIII pero podrían perfectamente estar ocurriendo en la actualidad, creo que poco hemos aprendido, siempre se ha dicho que el pueblo vasco tiene una capacidad innata para crear en general pero es muy malo para la política, creo que la clave está en nuestro nulo conocimiento de nuestra historia, ese vacío el imperialismo Franco-Español-Vaticanista lo ha suplantado hábilmente con ideologías de todo signo y pelaje totalmente ajenos a nuestra tierra, todo ello adosado de tintes clericaloides. El cóctel ha resultado mortal, a todo esto si le añadimos la falta de las claves para la recuperación del Paradigma Nabarro “Idioma nacional+Historia nacional” las consecuencias están a la vista.

El artículo en cuestión lo he reproducido íntegramente y así se titula “Peseteros, hojalateros y abertzales”

El siglo XVIII fue un siglo convulso en la navarra surpirenaica como el final de XVIII lo fue en la norpirenaica. Era el intento de crear las naciones española y francesa más fáciles de gobernar que el imperio de diferentes reinos conquistados y colonias que desde su génesis han sido España y Francia.

El ejemplo francés parecía el más apropiado para la retrasada y convulsa España, la gran solución: el Estado-nación. Un reguero de sangre. Todo menos reconocer la ocupación militar de Estados como el nabarro cuyos habitantes jamás hubieran consentido de forma democrática el Estado nación español, pues se les exigía dejar de ser vascos, por tanto dejar de ser nabarros, para ser españoles.

En ése momento, la pérdida de los Estados ocupados por España, el reconocimiento de sus derechos o la democracia que es lo mismo, hubiera llevado a España a su ruina total. Tras la recuperada libertad de las colonias americanas más interesantes, el poder perder la otra vaca a la cual ordeñar con impuestos, contingentes para sus acciones militares, barcos mercantes y de guerra de nuestros astilleros y bosques, así como el armamento fabricado por nuestras ferrerías, sin olvidar la huerta de nuestra ribera como elementos más significativos, hubiera supuesto la ruina española definitiva, probablemente su extinción pues sería un Estado imperialista sin pueblos a los que someter y explotar e incapaz de generar nada por sí misma.

Las carlistadas, que es de lo que estamos hablando, fueron la excusa perfecta para la búsqueda de la nación española: represión y eliminación manu militari de la resistencia vasca a los últimos vestigios de nuestro Estado: los Fueros, la recopilación de leyes que bajo el Estado nabarro los vascos fuimos dándonos hasta crear el conjunto de leyes que configuraban el "derecho pirenaico", diferente y único en el mundo, leyes que los castellanos no habían conseguido hasta entonces quitárnoslas, aunque sí agujerearlas y torpedearlas por la base: nuestra soberanía (el que manda en última instancia ante una situación de enfrentamiento), gracias a su ejército, ejército español tras la derrota militar de nuestros antepasados y la pérdida por tanto de nuestro Estado.

En aquellas circunstancias el pueblo vasco se alzó en milicias por sus leyes, por sus tradiciones, por su cultura diferente a la española (especialmente la lengua, que tras perder esa guerra sufrió un retroceso espectacular), lo que suponía en la práctica la negación de ser españoles tal y como se estaba creando esa nación de base castellana, restrictiva en lo cultural, en lo religioso, encorsetada en lo humano, de idioma único, nada universal, ni tan siquiera en su destino.

En frente de nuestro pueblo alzado en armas por su idiosincrasia - por su ser vasco -, se encuentran el ejército profesional y los "peseteros". Gente reclutada en la España profunda, sin ideas ni valores políticos, manipulados por sus dirigentes de la España piramidal, dirigentes que les han empobrecido tras perder sus colonias, conducido como pueblo a la rapiña de otros pueblos.

Mientras haya a quién robar seguirá fiel a sus dirigentes como un perro. El pueblo español retrató aquel siglo su alma en la llamada "Guerra de la independencia", cuando tras echar a los franceses, el pueblo en armas y dueño de la situación, pide con los brazos en alto en la ciudad de Valencia "las cadenas" a Fernando VII, colaborador con los franceses, pues no sabían qué hacer son su libertad, como aquél elefante al que se le amarra con una cuerda al nacer y crece amarrado a ella cuando romperla le hubiera sido sencillo.

Pero en el lado carlista estaban también sus famosos dirigentes apodados los "hojalateros", llamados así porque desde su inactividad (salvo para rezar) exclamaban constantemente: "¡Ojala ocurra esto! ¡Ojala ocurra aquello!-" Profecía autocumplida, cuando un objetivo es difícil y uno cree que no puede hacer nada y no hace nada, es seguro que no se alcanza el objetivo.

Esto es lo que ocurría en el siglo XVIII en esta tierra, pero es peor lo que ocurre en la Nabarra del siglo XXI. España (Francia va más avanzada) busca aún su Gran Estado nación, para ellos sobramos muchos, desde luego todos los nabarros. Cuentan, en su indisimulado propósito ahora revestido de la palabra democracia pero vaciada de su sentido, con sus "peseteros" ya instalados entre nosotros tras las carlistadas: ejércitos, policía, jueces, políticos y un largo séquito de funcionarios amarrados por sus dos pesetas, son las amarras de Nabarra a España.

Algunos son españoles de la gran nación: el ejército, policía nacional, guardia civil, jueces o muchos funcionarios y muchos políticos. Aterrizados todos ellos en esta tierra como elementos necesarios de la ocupación y de la construcción nacional española. Pero son peores y más necesarios a España los peseteros nacidos de las entrañas del pueblo vasco, entrañas heridas por el puñal español: ertzaintza, el resto de funcionarios y el resto de los políticos, dispuestos a clavar el ataúd de Nabarra por dos míseras pesetas.

Es tal su apego a esas dos pesetas, que los que se ven como más vascos de entre ellos, cuando España les ha quitado sus dos pesetas por no ser útiles en ese momento para su causa gran nacional, se han rebelado, se han humillado pidiendo al opresor esas dos pesetas hasta que las han conseguido. Enhorabuena, ya podéis volver a gritar a voz de imperio: ¡las cadenas!, o mejor: ¡España, España!, cualquier otro eslogan, cualquier otra reivindicación en nombre de este pueblo en vuestra boca, carece de credibilidad.

Además siguen los carlistas hojalateros, hoy muchos se llaman así mismos "abertzales": apocope de "a ver si sale". Impertérritos desde su casa encienden la televisión, qué grande les parece todo, qué difícil cualquier logro político real para este pueblo, mucho más fácil colaborar, repartirse la migajas de poder, poder español de instituciones españolas…, profecía autocumplida.

Pero el pueblo sigue vivo pese a todos ellos, sin dirigentes que lo sepan llevar, pues como dijo Sancho VI el Sabio, los navarros lo somos por la "fidelidad probada de sus moradores naturales" a Navarra.


El único objetivo con sentido político para este pueblo es la acumulación de fuerzas en la consecución de la libertad de nuestro Estado, cada nabarro que se suma a este objetivo hace que el arco se tense más y la flecha tenga la oportunidad de hacer diana.

Parafraseando al luchador por la libertad Matalas que en el siglo XVII se levantó en armas con el pueblo contra el tirano francés: "Agian, agian, egun batez, jeikiko dira egiazko nafartarrak, egiazko euskaldunak tirano arrotzak botatzeko". Ez etsi, elkartu gurekin egun horretarako prest egoteko, luzea da bidea baina sariak merezi du. Nabarrako Estatua askatzeko politika da herri honentzako sentsua duen politika bakarra, beste guztiak inperialistak ezarritakoak dira, "aber si sale" eta "peseteroei" esker.

2010/06/12

Iruinea, Junio de 2010

Iñigo Saldise Alda
La verdadera noción de la independencia
Soberanía de Navarra

La independencia es la condición de un País o Nación que no está sometido a la autoridad de otro u otros, es decir, ser sencillamente un Estado soberano. Hay que tener bien presente, que la libertad y la autonomía de un Estado, no depende de otro u otros. Para ello debemos tomar el término autonomía en el correcto y auténtico sentido íntegro del concepto, y no de la falsa autonomía con que han dotado a Nabarra las dos metrópolis, la francesa y la española, simple y llanamente para perpetuar su actual y demoledora dominación colonial. La total, absoluta y realmente única independencia política, supone para un País, bien sea Nabarra, Escocia, Flandes, Canarias, Cataluyna, o cualquier otro, la capacidad total de realizar un autogobierno efectivo y propio, por supuesto sin contar con algún tipo de injerencias extranjeras.

Este no es el caso del Estado de Nabarra, donde cualquier mequetrefe colonizador, bien francés o español, impone dictatorialmente en nuestra amada Baskonia su santa o mejor dicho maligna voluntad. ¿De qué les sirve a las autoridades autonómicas de los diferentes territorios nabarros decir que gobiernan en los mismos? Físicamente y tengámoslo presente que ni deciden y por lo tanto mucho menos administran. Son esos políticos extranjeros, con asiento y mando en Madrid y/o Paris, quienes finalmente determinan lo que van hacer con nuestro idioma, cultura, dinero, etc., a su vez de ser ellos y solo ellos, los que nos imponen sus severas leyes, ajenas a nuestro Derecho Pirenaico, a través de sus inquisitoriales tribunales y quienes incluso nos indican con quién podemos relacionarnos entre nosotros y con quién no, aquí y en la esfera mundial e internacional. En definitiva, fiscalizan, imponen y dirigen la vida de los nabarros y nabarras hasta reducirnos definitivamente a meros esclavos administrativos.

Si entramos detenidamente en el terreno económico, la independencia consiste en que cada Nación subsista por si misma, llegando incluso a ser capaz de producir lo que ciertamente necesita. Pero a decir verdad, este axioma tenía algún sentido en el pasado, en aquella época en la que era indudablemente posible la autarquía; si bien, el concepto de un País completamente autosuficiente jamás ha llegado a materializarse a lo largo de la historia de Humanidad. Hasta las tribus primitivas, como la nuestra, los vascones o indígenas europeos, comerciaban con las tribus bárbaras o extranjeras llegadas de fuera del continente, inicialmente mediante el método del trueque. De esa forma, un grupo de personas obtenía de otro, o mejor dicho de otros, lo que no era capaz de conseguir o producir por sí mismo, y por supuesto viceversa. La idea moderna de independencia económica se sustenta en la capacidad de sobrevivir o subsistir, y no meramente de la producción propia, sino del intercambio comercial, es decir, de lo que se produce en el País propio con lo que se genera en otras tierras ultraperiféricas, de forma que al final la balanza económica quede equilibrada. Si no en la balanza comercial, sí al menos el ajusto global de bienes y servicios políticos y económicos intercambiados.

Uno de los principales argumentos de nuestros detractores-es decir, de los enemigos de Nabarra y amantes de lo español o francés- es que estas tierras son incapaces de valerse por sí mismas, algo evidentemente falso, de hecho ya lo lograron nuestros mayores dentro del Reino de Nabarra. El nivel de vida actual en las tierras de Baskonia, a pesar de las nefastas políticas española y francesa, ciertamente corresponde o es equiparable a cualquier País europeo y occidental. Podemos afirmar incluso que es altamente superior al existente reino de España, debido a la avanzada cultura empresarial e iniciativa del Pueblo más antiguo de Europa, a nuestra cultura trabajadora y de investigación industrial. Además no debemos olvidarnos de nuestra lengua milenaria, el euskara, que es sin duda alguna europea y occidental a pesar de su antigüedad, de la misma forma que pueden considerarse occidentales a los portugueses e italianos, por ejemplo.

Los derivados de nuestra situación geoestratégica dentro de Europa, así como los aspectos meteorológicos particulares que nos han proporcionado nuestras grandes bellezas naturales, recursos palpablemente colosales que efectivamente son ocultados desde las metrópolis española y francesa. Cada parte del territorio de nuestra amada Baskonia tiene su propio encanto intrínseco y privativo. No podemos decir lo mismo de los dirigentes políticos que pasan por ser parte de esta tierra, a los cuales, los soberanistas nabarros censuramos por sus engreimientos de grandeza, por su continuada soberbia, por haberle inculcado a la población de Nabarra la falsa idea de que son grandes- objetivamente no son nabarros como los demás, sino que son navarreros o falsos y/o erróneos nacionalistas- y, sobre todo, por seguir engañando a todos, a todos los habitantes de la Nabarra Plena y en general, al resto de habitantes del mundo, anteponiendo sus necesidades económicas primarias y exclusivas a la auténtica necesidad libertaria de los nabarros y nabarras.

Los actuales y falsos dirigentes políticos de las tierras de Baskonia, que en su día conformaron el Estado soberano de Nabarra, son los principales responsables políticos de que sigamos sin acceder o recuperar nuestra necesaria independencia. A pesar de que avanza este año 2010 y, en consecuencia, nos acercamos al plazo límite establecido por el Comité de Descolonización de los Pueblos de las Naciones Unidas para que recuperen su libertad los países todavía esclavizados, sojuzgados y sometidos, mediante la infame fórmula colonial, a naciones extranjeras, siguen lanzando falsas y vagas proclamas, intentando mantener la colonización y por ende, nuestra esclavitud.

Tengan presente esos falsos líderes y sus bases engañadas, que la recuperación de la plena independencia y soberanía del Estado de Nabarra, comienza por el ejercicio colectivo del reconocimiento de la ilegitimidad franco-española. La recuperación de nuestros Derechos Humanos, ciertamente inexistente en la actualidad en la totalidad del territorio del Estado de Nabarra, pasa exclusivamente por la acción y el ejercicio pacífico de la absoluta desobediencia política, civil y fiscal ante los imperios de la república de Francia y del reino de España. Nosotros los patriotas nabarros y nabarras debemos tener presente que ninguna ley impositora española o francesa, tiene legitimidad alguna en estas tierras. La independencia, no se pide realmente se coge, la independencia simplemente se ejerce, no se predica.

Hoy, tanto la diplomacia española como francesa, siguen moviéndose de forma furtiva y sibilina para que la Organización de las Naciones Unidas no incluya a Nabarra en la relación de países que deben adquirir o mejor dicho en nuestro caso, recuperar la soberanía e independencia de forma inmediata, porque mirando el calendario ya estamos en junio y el plazo para dicho trámite, obligado según las distintas resoluciones de la O.N.U., concluye el 31 de diciembre del presente año. A los patriotas y soberanistas nabarros y nabarras, realmente no nos asombra la apatía de esos políticos, pensadores, analistas,…, supuestamente independentista, soberanistas o simplemente tienen la desfachatez de autollamarse nabarros, ya que continuadamente demuestran con sus actos incoherentes que están altamente colonizados o incluso se les puede considerar en algunos casos que son agentes colonizadores. Es el momento de apartarlos del candelero político franco-español, es el momento de no acudir a la llamada a las urnas realizadas por el rey de España y el presidente de la república de Francia, es el momento de que el Pueblo Nabarro exija un gobierno propio, declarando de manera unilateral la independencia, recuperando de este modo la plena y necesaria soberanía de nuestro Estado, Nabarra.

Estado de Nabarra. Descolonización mental

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. Descolonización mental
Soberanía de Navarra

“Pueblos libres, recordad esta máxima: Podemos adquirir la libertad, pero nunca se recupera una vez que se pierde”. Jean Jacques Rousseau, Filósofo ginebrino

Descolonización mental: Si hay algo que debemos tener bien claro y presente todos nosotros, es que el actual status del Pueblo Nabarro en sus exigidas relaciones con el reino de España y la república de Francia, es sencillamente la de un pueblo colonizado, por consiguiente sometido y subordinado. Para que ese sangrante status cambie, el Pueblo Nabarro debe despertar del letargo inducido que padece y ejercer de inmediato su pleno derecho a la soberanía y a la libertad. Estas nociones básicas, no pueden obviarse y menos aun ocultarse. No hay que perderse en improductivos disimulos, a base de juegos de palabras bonitas y expresiones vagas, que ciertamente no plantean ninguna alternativa para modificar el actual status políticos que nos vemos obligados a sufrir los nabarros a ambos lados del Pirineo.

Hay que interiorizar de una vez por todas, que lo primordial es reconocer y alegar con honradez e integridad, tanto patriótica como intelectual, que el primer movimiento para recuperar nuestra libertad y soberanía, pasa por tratar en su justa medida el problema de la colonización mental. Para ello hay que realizar, o mejor dicho seguir realizando, una necesaria y correcta información histórica, política e incluso jurídica, con las cuales ilustrar debidamente a la totalidad de la Nación Nabarra, de las particulares únicas y especiales de nuestro Estado, siguiendo pública y diariamente al pie de la letra, el Paradigma Nabarro(7). Así, todo nuestro trabajo debe estar encauzado hacia la total e imperiosa descolonización mental; primera del individuo nabarro y después de la Nación Nabarra, ya que inmediatamente a continuación, esto nos facilitará alcanzar de una forma más rápida o anticipada, la descolonización físico-política.

A la fecha de escritura de este libro o mejor dicho cuaderno, no podemos ocultar que la colonización política es total. Todas las instituciones existentes en el territorio de los nabarros son extranjeras y por lo tanto impuestas a los mismos. El colonizador a base de falsedades y mentiras ha conseguido que gran parte del Pueblo Nabarro se crea, no solo que sus opciones ideológicas están representadas en las dichas instituciones impuestas, sino inclusive han conseguido que los nabarros crean incluso que esas instituciones son suyas, además de obtener del pueblo colonizado que se crea con la peripecia suficiente de gobernarse así mismos, libremente, algo que es absolutamente falso, ya que ciertamente las decisiones finales se toman en las capitales de las metrópolis colonizadoras, es decir, se asignan e imponen a los nabarros desde Madrid y Paris.

Así pues, podemos llegar a manifestar sin ruborizarnos, hoy por hoy, que todos los partidos políticos que se estructuran dentro de los estados español y francés, presentándose a continuación a las urnas impuestas por esos estados colonizadores, que irrebatiblemente legitiman con dicho acto integrante a las constituciones blindadas de esos imperios, concluyentemente intransigentes con los derechos de los nabarros, que nos arrastran de forma consciente o inconsciente, pero ciertamente sin remisión a una brutal espiral negativa para el objetivo soberanista o patriótico, que incluso actualmente se atreven a predicar y dicen defender algunos de ellos, pero evidentemente son colaboradores directos y necesarios para la esclavitud política que sufre a día de hoy la Nación Nabarra.

El correcto conocimiento de nuestra historia política, es decir la del Reino de Nabarra, sumado a un análisis profundo y crítico de la actual situación de subordinación en la que estamos abocados en este presente perenne, nos sanará en gran medida nuestras mentes colonizadas. Repasando detenidamente el caminar históricos del Pueblo Nabarro desde la pérdida de la soberanía e independencia de nuestro Estado, podemos comprobar y apreciar con certeza matemática, la continuada y total pérdida del Derecho Pirenaico con el cual se organizaron nuestros antepasados en tiempos de libertad, algo solamente alcanzable de nuevo lejos de las instituciones españolas y francesas, por lo que debemos mirar y recurrir a Tribunales y Organismos Internaciones, acogiéndonos necesariamente al Ordenamiento Jurídico Internacional, tanto antiguo como moderno.

7. Navarra como paradigma. “Haria”, nº 23, Luís María Martínez Garate. 2007


Extraído del libro “NABARRA, Reflexiones de un Patriota” Iñigo Saldise Alda 2010

2010/06/09

Iruñea, junio de 2010

Iñigo Saldise Alda
El príncipe de Biana
Soberanía de Navarra

En la ciudad de Tutera, concretamente el 20 de enero del año 1423, el rey Carlos III de Nabarra, que ha pasado a la posteridad como el Noble, instauraba el título de príncipe de Biana para su nieto también llamado Carlos, legítimo heredero de su hija Blanca de Nabarra y con vistas de salvaguardar el Reino o Estado de los nabarros, de las garras ambiciosas de su yerno, el infante aragonés de origen castellano Juan de Trastámara, el cual ha pasado a la historiografía nabarra como el Usurpador.

A día de hoy, podemos afirmar sin ningún tipo de duda, que este título originariamente nabarro, también ha sido usurpado por el heredero al trono español, Don Felipe de Borbón y Grecia. Incluso de este acto se hace eco parte de la historiografía española, pues así lo menciona sin ningún tipo de pudor, ya consideran al infante Don Carlos de Borbón-Dos Sicilias, como legítimo dueño del título, ya que incluso se atreven a señalar a su madre, Doña Alicia de Borbón-Parma, como la legítima reina de todos los nabarros y nabarras, siguiendo para ello un falso orden histórico de sucesión, el cual es tan ilegítimo como aquel que aportan aquellos que sostienen a Don Felipe de Borbón y Grecia como príncipe de Biana.

A decir verdad, no han sido solo los miembros de la casa de Borbón quienes han suplantado de forma ilegal, al verdadero o la verdadera poseedora del título del heredero o heredera a la Corona de Nabarra. Tras la invasión militar española, sin previa declaración de guerra del año 1512 y el asentamiento de la ocupación genocida española en las tierras nabarras del sur del Pirineo, la casa de los Austrias, reinantes en el reino de España e iniciadores de la colonización de los nabarros surpirenaicos, utiliza de forma ilegítima y sin ningún tipo de rubor, los títulos de rey de Nabarra y del príncipe de Biana, buscando legitimarse ante un pueblo nabarro derrotado que sufría la terrible represión de la soldadesca española y la denominada Santa Inquisición, arma católica esencial e imprescindible para lograr el sometimiento de los nabarros surpirenaicos.

Volviendo a la casa de Borbón o Bourbon, inicialmente a la rama de los Anjou a la cual pertenece Don Felipe de Borbón y Grecia, debemos repasar el Tratado de Utrecht realizado en el año 1714, entre rey Felipe de Borbón, V de España y Louis XIV de Francia, este último también se auto titulaba como II de Nabarra. En dicho tratado el rey español renunció para él y todos sus herederos a todos los derechos sucesorios en Francia y Nabarra, en beneficio del delfín de Francia, el futuro Louis XV de Francia, el cual, a semejanza de su antecesor, también se auto titula como IV de Nabarra. Este Tratado nos indica, que en la guerra de sucesión española iniciada en el año 1833, ninguno de los pretendientes al trono español podía titularse como rey de los nabarros.

Legalmente el único miembro de la casa de Borbón, que ha ostentado de forma legítima el título de príncipe de Biana, fue Enrique de Borbón y Albret, que accedería al trono del Reino o Estado de Nabarra a la muerte por asesinato de su madre, la reina Juana III de Nabarra. Así, concretamente, e1 de abril del año 1553, en el bello palacio de Pau, la aún princesa de Biana, Juana de Albret, paría a un hijo varón, al cual le dan el mismo nombre que su abuelo el rey de Nabarra, Enrique II el Sangüesino.

Desde la instauración del título de príncipe de Biana, este tenía lo obligación de ser educado en la Corte del Reino Soberano de Nabarra. Por ello, tras el asesinato de Enrique III de Nabarra y IV de Francia, los Estado Generales de Nabarra pidieron al hijo de este, el delfín de Francia y futuro Louis XIII, su presencia en la Corte de Pau, pero este bajo consejo del cardenal Richelieu, no solo se niega, sino que renuncia al título de príncipe de Biana, tanto para él como para todos sus sucesores, es decir, para cualquier rama de la casa de Borbón. Pero por si esto no fuera poco, el testamento realizado en el año 1607 por Enrique III de Nabarra y IV de Francia, deja bien claro que el Reino de Nabarra, y por tanto todos sus títulos, era devueltos a la casa de los Albret, la cual posee en la actualidad herederos y herederas directos de Catalina de Foix y Juan de Albret, que dado el caso siguiendo el Derecho Pirenaico-antes leyes que reyes-podría volver a gobernar en un Estado Soberano de Nabarra, solo si así lo decidimos los nabarros y nabarras.

Estado de Nabarra. La contaminación del colonialismo

J.M.Unzueta
Estado de Nabarra. La contaminación del colonialismo
Soberanía de Navarra

“Nada hay más temible que una ignorancia activa” Goethe. Poeta, novelista y científico alemán

http://www.hiru.com/es/historia/historia_12950.html

Leyendo la historia que transmiten estas organizaciones subvencionadas con el dinero de todos los contribuyentes, no tengo más remedio que denunciar a toda esta casta de pesebreros encima abertzales o abersisales, este tipo de espécimen son los que legitiman a los imperialistas Franco-Español-Vaticanistas, y lo peor que los textos de historia que estos pseudo-historiadores publican so los que se dan en las escuelas y universidades.

Solamente he indicado un párrafo sobre la historia que esta casta de falsarios cuenta.

Batalla que se produjo entre los castellanos y los franco-navarros el 30 de junio de 1521. Cuando el general francés Asparros reconquistó el reino de Navarra se dirigió a la Rioja. El emperador Carlos V tenía ya resuelto el conflicto de los Comuneros de Castilla, por lo que le pudo hacer frente y le obligó a retirarse. Asparros, a pesar de contar con pocos hombres, no esper oacute a tener ayuda, por considerar que el terreno le era propicio. Las tropas castellanas se impusieron rotundamente, mientras que los franco-navarros perdieron más de 5.000 soldados y el propio Asparros sufrió heridas graves. Como consecuencia de la batalla, Castilla recuperó Pamplona y toda la Alta Navarra.

Afortunadamente cada vez tenemos más compatriotas que son auténticos estatalistas nabarros y gracias a ellos va cayendo esa cortina parecida al telón de acero en la cual se narra siempre la historia de los conquistadores y colonizadores de Francia-España y el Estado Vaticano este último el peor, pues ha sido en toda la historia el ideólogo de todos los genocidios habidos y por haber.

He insertado estos párrafos de nuestros compatriotas Aitzol Altuna y Iñigo Saldise los cuales desmontan todas las mentiras de los historiadores pesebreros y vendidos al imperialismo y además “ABERTZALES”

La Familia Albret o Labrit (1486-1620)Por Aitzol Altuna

A la muerte de Isabel la Católica en 1504, Fernando se casa con Germania, pariente de los reyes navarros, con la pretensión de acceder así a la corona navarra de nuevo. Pero Germania era estéril y no le da el hijo, la excusa para conquistar Navarra, que Fernando deseaba. Entonces Fernando mira al lado de los ya mencionados beamonteses que encabeza otro conde de Lerín (hijo de otra hija de Juan II de Aragón), al que promete ayuda en su lucha intestina contra los agramonteses. Juan de Albret destierra al conde de Lerín por conspirador e indeseable. Fernando dice aplaudir la decisión y se compromete con su tropa a hacer cumplir el destierro para lo que pide a cambio villas y castillos fronterizos. Cuando el conde de Lerín llega a encontrarse con Fernando éste lo abraza y le hace dueño de inmensos territorios a cambio de su ayuda para conquistar Navarra.

Fernando se alía con Inglaterra donde gobernaba Enrique VIII. Quiere, dice Fernando, ayudar a los ingleses a recuperar la Guyena, que es como llamaban a Gascuña o Aquitania (que los ingleses perdieron tras la guerra de los 100 años contra Francia), para lo que solicita el paso de sus tropas por Navarra al rey Juan de Albret.

Además el papa Julio II había creado una Santa Liga para echar a los "herejes" franceses del norte de Italia y aliados de Navarra. Juan de Albret deniega el paso a las tropas de Fernando, no le hace falta, Vascongadas y Aragón son más que suficientes para pasar a Aquitania; Juan de Albret no se fía, es lógico tras lo del Conde de Lerín y el manifiesto deseo en el pasado de Fernando de gobernar Navarra. Curiosamente era la misma excusa que casi cuatro siglos antes había puesto Alfonso VIII para conquistar vascongadas, en ambas ocasiones con el beneplácito de la Iglesia romana como se verá.

Fadrique Álvarez de Toledo, duque de Alba, entra en Navarra y toma Pamplona en 1512 con ayuda de los beamonteses y el conde de Lerín (a estas alturas cuñado de Fernando y que históricamente representa la figura del traidor), y se olvida de Aquitania; con él van 1.000 soldados de armas, 2.500 caballeros y 6.000 infantes; los ingleses, que habían desembarcado en Pasaia y esperaban a Fernando en Baiona, elevan anclas y se vuelven a su isla, vistas las verdaderas intenciones de Fernando. En la toma de Tudela dirige las tropas aragonesas el arzobispo de Zaragoza, hijo bastardo de Fernando el Católico.

La excusa final para la conquista es la excomunión (Exigit contumacium) emitida por el Papa Julio II al rey de Navarra por apoyar al hereje rey de Francia Luis XII, esta carta es falsa pues tiene fecha del mismo día de la toma de Pamplona y no había faxes (aunque el Vaticano nunca la ha desmentido), de ahí que en Navarra Fernando II el Católico sea conocido como Fernando el Falsario. Tras la ocupación del viejo reino el duque de Alba manda un mensaje a Fernando donde dice que la conquista se "ha llevado a cabo para bien de la Iglesia y extirpación de la herejía".

Fernando será rey de Aragón (1479-1516) de Castilla (1474-1504), de Sicilia (1468-1516), de Nápoles (1504-16) y de Navarra (1512-16). Toda Navarra, incluida la Baja Navarra, la sexta merindad, queda en manos castellano-aragonesas, después del primer intento de conquista del reino 500 años antes por Fernando I de Castilla, a la sazón hijo de Sancho III el Mayor de Navarra.

Fernando Trastamara nació en 1452 en el pueblo de Sos, en el Palacio de Sada, límite entre Navarra y Aragón, gracias a que su madre, estando casi de parto, salió corriendo de Sangüesa (Navarra) para que su hijo naciera en tierras aragonesas; desde Sos se divisa el territorio de la familia de Javier y el monasterio de Leire, conocido luego como Sos del Rey Católico, de ahí la famosa frase Navarra de "mecagüen Sos" (del rey Católico), forma de insultar la memoria de este rey nefasto para Navarra, comparable en este adjetivo a Alfonso VIII o a Julio Cesar.

Juan de Albret promete: "volveré".

En 1513, con ayuda francesa, Juan de Albret toma Garazi (Sant Jean de Pie de Port, como se dice en gascón), que era controlado por las tropas del duque de Alba, y se dirige a Pamplona. El duque de Alba avisado de la toma de Garazi llega antes a Pamplona y se encierra en ella. Juan de Albert no consigue rendir la fortaleza y las tropas de refresco del rey francés Luis XII no llegan, se habían dirigido a la costa temerosas del ataque inglés; las que sí llegan son las nuevas tropas castellanas. Juan de Albert huye, los gipuzkoanos oñacinos atacan a la retaguardia de Juan de Albert que lleva la artillería pesada en su paso por Belate y le roban los 12 cañones que aparecían desde entonces en el escudo de Gipuzkoa (hoy eliminados). Gipuzkoa había sido conquista e integrada en Castilla desde hace tres siglos, pese a que siga habiendo partidarios de volver a su Estado original, y obligada a defender su territorio para el rey castellano.

En primavera de 1513 Juan intenta regresar pero Fernando se le adelanta, compra al rey de Francia al que le da la codiciada ciudad de Milán para que no apoye al rey navarro.

En 1515 oficialmente Navarra pasa a formar parte de Castilla.

En 1516 muere Fernando el Católico, que acabó por conquista con el Reino de Navarra. El nieto de Fernando será el nuevo rey del sur de Navarra, se trata de Carlos V de Alemania, que se autoproclama a su vez Carlos I de España; es el primer rey español, pues Fernando nunca reinó sobre Castilla, que estaba en manos de su hija, Juana la Loca (llamada así por sus problemas mentales), o de su yerno el Alemán Felipe el Hermoso (ambos padres de Carlos) y después en manos del Cardenal Cisneros. Precisamente el Cardenal Cisneros asume la regencia mientras llega el nuevo rey. Este Cardenal ordenó la destrucción de los 116 castillos navarros y el desmochamiento (bajar la altura) de algunas iglesias usadas como fortalezas y el derribo de los monasterios de Santa Elualia y San Francisco.

Carlos será Carlos I de España, V de Alemania y V de Navarra, gobernará sobre uno de los mayores imperios jamás conocidos en la historia gracias a sus colonias por todo el mundo, será el primer rey español y marcará el declive del Imperio Castellano, que a partir de este rey entrará poco a poco en decadencia.

Carlos promete devolver Navarra a sus legítimos reyes antes de seis meses; este pacto se firma ante el rey francés en Noyon, previa llegada de Carlos a España por primera vez, pues había nacido en Gante (Bélgica) y criado con su abuelo paterno (apenas sabía castellano), el duque alemán Maximiliano I. Carlos no cumple su palabra, lógicamente.

Su reinado empieza mal, los comuneros castellanos ven en él a un extranjero y se sublevan.

Juan III de Albret se hace de nuevo con el mando de la legítima corona Navarra, quiere aprovechar el momento de debilidad castellana con la sublevación comunera, y en 1516 el mismo rey de Francia Francisco I se lo propone y brinda ayuda. Juan se dirige a Pamplona, donde se reuniría con el mariscal navarro Pedro que con 1.200 navarros había ido al Ronkal para ir reclutando tropas entre el pueblo que se le une de forma entusiasta. Pero Pedro es derrotado por el también mariscal castellano Villalba sin lograr unirse a las tropas de Juan de Albert. El padre de San Francisco Javier, el agramontés Juan de Jaso (Doctor en Derecho y Presidente del Real Consejo, por tanto la familia navarra más importante de la frontera aragonesa), y dos hermanos suyos huyen a Francia donde muere el padre que no resiste la pérdida de su castillo, del siglo X, que había sido destruido por el ejército castellano-aragonés por orden del Cardenal Cisneros. Javier, el pequeño de todos los hermanos tenía 12 años y se queda con su madre viviendo en las ruinas del castillo.

El nombre de Javier sería una deformación de la palabra Etxeberria-Exaberria-Exabier-Xabier.

Enrique II de Albret (1517-55) hereda el reino de su padre Juan III, que muere también antes de finalizar ese año 1516 en el Bearn donde había huido, y tras la excomunión de su madre por el Papa. Enrique sigue la lucha, en 1521 pone su tropa en manos del mariscal francés Asparros (Andrés de Foix, señor de Asparros) que toma casi sin resistencia Pamplona, salvo la fortaleza. Ignacio de Loiola es el capitán de la misma (oñacino favorable al rey castellano), es finalmente herido y sólo entonces rinde la fortaleza. Ignacio vuelve a su torre en Loiola, Azpeitia, y se recupera, abandona toda su vida anterior de crápula y soldado, comenzando su peregrinaje a Montserrat y luego a Jerusalén, donde decide crear la Compañía de Jesús.

Asparros conquista ahora Navarra entera. Pero no se detiene ahí, las órdenes de Francisco I de Francia son hacer uno con los sublevados comuneros castellanos y buscar la ruina de Carlos I, Navarra ahora es secundaria para el rey francés. Pero a Asparros se le resiste Logroño y en ese ínterin son derrotados los comuneros castellanos. Miles de castellanos vienen ahora a hacer frente a Asparros el cual recula y los espera en la explanada de Noain (Sierra de Erreniega), cerca de Pamplona, sin entrar en la ciudad que lo haría invencible. Los castellanos son el triple que las tropas de Asparros (entre ellos gipuzkoanos reclutados por el rey castellano según los Fueros), Asparros cuenta con: unos 1.000 navarros y 3.000 bearneses. Asparros tampoco espera a que se les unan las tropas que aún están en Pamplona y las de Tafalla (unos 8.000 hombres más).

La cabezonada le sale cara a Enrique de Albret que ve como su ejército es derrotado en Noain el 30 de junio de 1521 y huye a Francia, Navarra desaparece como reino.

Los últimos castillos en caer son los Amaiur y Hondarrabia. En Amaiur se refugian los dos hermanos de Javier, Miguel y Juan que habían vuelto para seguir luchando junto con otros 200 navarros. Al caer Amaiur ese año 1521 y arrasado el castillo hasta sus cimientos (Amaiur será desde entonces símbolo de la libertad navarra y vasca), los últimos navarros libres se refugian en la recién tomada, por el hijo del Mariscal Pedro de Navarra (el también Pedro), Hondarrabia; son unos 1.000, entre ellos Miguel y Juan de Jaso que habían logrado huir de la prisión de Pamplona donde habían sido confinados.

El 30 de junio 1522 las tropas castellanas lograron una importante victoria contra los señores de Urtubia y Semper (labortanos gamboinos, favorables a Navarra), que conducían a sus hombres desde la Fortaleza de Hondarrabia hasta el alto de Aldabe, donde acampaban las tropas castellanas, al creer que las teas que veían venir desde Oiartzun eran refuerzos y no gente haciéndose pasar por tales acompañados por la oscuridad de la noche; los Señores de Urtubia y Semper huyen y son finalmente derrotados. Este acontecimiento es el que da lugar al alarde de San Marcial de Hondarrabia.

El 25 de marzo de 1524, tras una batalla muy desigual, cae Hondarrabia, Miguel y Juan de Jaso y Pedro de Navarra son amnistiados por Carlos V, pero obligados después a jurarle fidelidad en Burgos, y se van de la fortaleza son sus estandartes y tropa navarra (no había tropa francesa en la toma de Hondarrabia).

Aquí acaba la historia de Navarra como reino independiente. Castilla crea una guarnición militar en el centro de Pamplona, amurallándola fuertemente para controlar el reino; la ocupación militar duró tres siglos. Carlos I de España cambió todo el clero de Pamplona que será a partir de entonces pro-castellano.

Reflexión histórico-política de la batalla de Noain por Iñigo Saldise(año 2009)

En una batalla cruenta, más de 5.000 navarros quedaron tendidos muertos en el suelo, víctimas del ejército español. La libertad de los vasco(ne)s surpirenaicos llegaba a su fin. Para nosotros, los soberanistas navarros de hoy, el recuerdo del valor de esas tropas navarras permanece vivo en nuestro recuerdo, manteniendo su querella presente, por la recuperación de la soberanía para el Estado vasco(n).

Como en los últimos años, desde Nabarralde, llevamos realizando unos actos serios y en conciencia, encaminados a honrar, a aquellos más de 5.000 héroes de nuestra amada patria, que acabaron sus días luchando por la libertad de Navarra. Estos actos se realizan concretamente en Getze, lugar donde está situado un conjunto monumental en su honor.

Los navarros de hoy, 488 años después, no nos hemos rendido y seguimos reclamando la soberanía para nuestro Estado, el cual nos traerá la libertad, ante la imposición tiránica a la que nos someten el reino de España y la república de Francia.

Hoy, los navarros sufrimos las imposiciones militares, políticas, económicas y culturales, aún así, formamos una sociedad viva y creadora, por eso el pueblo vasco(n) continúa luchando por su independencia. Hoy somos nosotros los que hemos tomado el testigo de nuestros antepasados tras la invasión y ocupación de nuestro país, que siguieron firmes y fieles, con las labores de recuperación de la soberanía del Estado de Navarra.

Los más de 5.000 navarros que murieron combatiendo por la libertad, en la denominada batalla de Noain, no deben ser olvidados, pues su lucha no fue en balde. Son un ejemplo para nosotros y por eso hay que recordarles, hay que honrarles, hay que mantener viva su memoria para las generaciones venideras, a través de nuestro esfuerzo libertario, pues son un ejemplo del carácter propio navarro.

NABARRAKO ERESERKIA

Nabarra, reflexiones de un Patriota

Reflexiones de un Patriota by Iñigo Saldise Alda

ASKATASUNA = Baskoinak x Nafar Paradigma

"PRO LIBERTATE PATRIA GENS LIBERA STATE"

"Aberri askearen alde jende librea jaiki"

"De pie la gente libre a favor de la libertad de la patria"

Navarre shall be the wonder of the world

by WILLIAM SHAKESPEARE

EUSKARA-LINGUA NAVARRORUM

EUSKARA-LINGUA NAVARRORUM

©NABARTZALE BILDUMA 2011

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