2010/06/16

Iruñea, junio de 2010

Iñigo Saldise Alda
Noain: honor, homenaje, tristeza y vergüenza
Soberanía de Navarra

A las dos de la tarde del 30 de junio del año 1521, las patrióticas tropas nabarras formadas por algo más de 5.000 hombres, capitaneadas por el joven señor de Asparrots, se enfrentaron valientemente y en campo abierto, a un numeroso contingente de tropas españolas, las cuales, les superaban más de tres veces en número, además de contar en sus filas con varios señores traidores, ciertamente desertores de su condición nacional nabarra. La batalla fue larga y muy sangrienta, cayendo finalmente la victoria del lado del invasor español, gracias primordialmente al trabajo realizado por su artillería, numerosa y superior a la nabarra. Al anochecer más de 5.000 patriotas nabarros yacían tendidos muertos tras la cruenta batalla en los campos comprendidos entre Ezkirotz, Noain y Barbatain. Tras la batalla, los españoles encargan al desertor nabarro y nuevo español, Francés de Beaumont, la tarea de hacer rendir de nuevo Iruñea, otorgándole sin ningún tipo de cautela y escrúpulo, el poder necesario para conseguir dicho objetivo militar.

A pesar de la continuidad independiente y soberana del Reino o Estado de Nabarra al norte del Pirineo hasta el año 1620, la libertad de los vasco(ne)s surpirenaicos ese día llegó a su fin. Para nosotros, los estatalistas nabarros y nabarras de hoy, es un honor recordar el valor patriótico de los leales nabarros que dieron su vida por la libertad de la Nación Nabarra. Un recuerdo que permanece muy presente y vivo en nuestro recuerdo hoy, en nuestra memoria histórica, obligándonos a mantener en pleno año 2010, su querella vigente para la recuperación de la plena soberanía para el Estado vasco(n) y la libertad de la Nación Nabarra. Para nosotros los soberanistas nabarros y nabarras, nos avergüenza que muchos de nuestros compatriotas, hombres y mujeres, no conozcan lo sucedido ese fatídico día de año 1521 y su principal consecuencia, la actual falta de libertad para los nabarros. A pesar de la actual y más que meritoria labor de la empresa Nabarralde, S.L. la sociedad nabarra continua narcotizada por la labor colonizadora del reino de España y la república de Francia. Pero lo que es una auténtica vergüenza para los patriotas nabarros y nabarras, es la ocultación de este importantísimo acto por medio de los actuales (falsos) gobernantes de la Comunidad Foral (y española) de Navarra.

Una ocultación clara y ciertamente premeditada, buscando únicamente mantener el actual sometimiento y subordinación del Pueblo Nabarro. Un sometimiento militar, político, económico, religioso, lingüístico y cultural continuado, con el claro objetivo de colonizar totalmente a los nabarros y nabarras que aún mantenemos nuestro espíritu libre y nuestra mente descolonizada. Aunque estos agentes imperialistas y colonizadores intenten ocultar nuestro trabajo continuado y libertario, nosotros y nosotras seguimos recordando a nuestros antepasados, aquellos y aquellas que físicamente conocieron la auténtica autonomía, la efectiva independencia y lo que ello significa. Aunque esos denominados navarreros menosprecien la acción de nuestros bravos antepasados, deben saber que su lucha no fue en balde. Ciertamente, no hay ninguna duda, son un ejemplo para todos nosotros, los nabarros y nabarras, por eso debemos recordarles, hay que honrarles y por supuesto nos forzamos a mantener viva su memoria para las generaciones venideras, a través de un verdadero esfuerzo libertario desde unos actos innegablemente independientes y una actitud soberana ante los imperios impositores colonizadores del reino de España y la república de Francia.