2012, la colonización española sobre ruedas
Iñigo Saldise AldaEl próximo sábado, día 18 de agosto del año 2012, dará comienzo la vuelta a España en la capital de nuestro Estado, violenta e injustamente transformada en colonia española junto a las tierras del sur del Pirineo, mientras que son parte de la colonia francesa las nabarras tierras del norte de los Pirineos. Todo ello, indudablemente debido a las ilegítimas acciones bajo el criminal amparo de la fuerza terrorista de las armas. Unas acciones llevadas a cabo desde el siglo XI hasta el siglo XVII, originariamente por el germen del Reino imperial español (Castilla-León y Barcelona) y finalmente por el Reino de Francia, hoy estructurado políticamente como una República, pero sin perder ese sentimiento imperial que ya poseía cuando era un Reino.
Alguien puede pensar
que la elección de Iruñea, la ciudad de los vasco(ne)s o simplemente nuestra
ciudad, haya sido una pura o mera casualidad. Un error
interiorizado por el gran grado que colonización que llevamos soportando desde
hace 500 y algunos, los nabarros occidentales, más. Simplemente debemos saber e
interiorizar, si pensamos eso, que estamos equivocados.
Repasando la historia de nuestra Nación nabarra,
sabemos que este año se han cumplido los 500 años de la brutal e ilegal
invasión de nuestro Estado, en forma de Reino, soberano e independiente, lo que
conllevó la posterior ocupación española de Iruñea. Así pues, ya después de 500
años de la ilegítima ocupación de nuestra ciudad causada por las tropas invasoras
españolas del duque de Alba, y por supuesto gracias a la labor nacionalista y colonizadora
española llevada a cabo por una señora castellana de ideología innegablemente nacionalespañola
y de ultraderecha, es decir, una persona no nabarra y fascista, junto a su servicial
entorno político español y por consiguiente anti nabarro, nos vemos los
nabarros en la imposición maligna de tener que soportar el fastuoso y costoso despliegue
deportivo, policial, militar, médico,… y
lo más impertinente, mediático español de indudable carácter colonizador,
montados esta vez en la totalidad de las bicicletas, motos, coches, furgonetas
y camiones que corren en la denominada Vuelta a España. Como dato histórico, el
origen de esa carrera ciclistas española se remonta al año 1935, concretamente en
tiempos de la II República de España, gracias a la labor de los españoles Juan Pujol de Barcelona y de Clemente López Doriga de Santander.
Esta parafernalia
imperialista española, una vez más, les va a servir a los nacionalistas
españoles para justificar lo injustificable ante la opinión pública mundial, después
de haber llevado a cabo la falsificada e ilegal usurpación de las tierras de
Nabarra existentes al sur del Pirineo, vamos, modelo semejante a lo que hacen
los franceses con su Tour de France.
Concluyendo, tanto la
política imperial y colonial española, como la francesa, incluso la derivada
desde espectáculos deportivos diversos, es algo que no debemos aceptar y
tampoco acatar los auténticos nabarristas, nabartzales o sencillamente, los patriotas
nabarros.