Marquesa de Champaña-Nabarra
y Gil de Rada
Iñigo Saldise Alda
Marquesa de Champaña-Nabarra y Gil de Rada, nació en
hacia el año 1245, siendo hija natural del rey de Nabarra, conde de Champaña y
Brie Teobaldo de Champaña y Capeto-Francia, de la relación extramatrimonial de
éste con la dama nabarra Marquesa López de Rada y Narbona.
Fue educada en la Corte del Reino de Nabarra como cualquier mujer de alta cuna al modo y costumbres
de la época, complementadas con una gran educación religiosa de la doctrina
cristiana.
Como consecuencia del pacto de amistad y alianza,
firmado entre los Reinos de Nabarra y Aragón, llevado a cabo en Monteagudo el
día 9 de abril del año 1254, Marquesa de Champaña-Nabarra fue prometida en
matrimonio con el hijo natural del rey Aragón, Valencia y Mallorca, conde de
Barcelona u de Urgel, señor de Montpelier y otros feudos en la región de Occitana
Jaime de Aragón y Montpelier, en su
relación extramatrimonial con la dama Berenguela Fernández de Castilla, llamado
Pedro Fernández de Aragón.
En el año 1263 tuvo a su único hijo, al cual llamaron
Pedro de Fernández de Aragón y Champaña-Nabarra.
En el año 1267, Marquesa de Champaña-Nabarra fue
repudiada por su marido, el cual se casaría un año después con Teresa
de Gombau y Entenza al año siguiente.
Marquesa de Champaña-Nabarra se retiró a un
convento, alejándose con ello de la vida
aristócrata y contemplativa de la Corte aragonesa del Reino de Aragón, sita en
Zaragoza. En dicha ciudad fundó el convento de Madres Canonesas de la orden del
Santo Sepulcro, siendo su primera priora. Allí permaneció retirada hasta su
muerte. Hizo testamento en el año 1303, donde donaba todos sus bienes a dicho
convento y dando instrucciones explíticas de que se le enterrara en él. Al año
siguiente murió y fue sepultada según sus deseos.