Frente Patriótico Nabarro
Iñigo Saldise Alda
“La locura es hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes”. Jane Fulton o Rita Mae Brown o Albert Einstein.
Al igual que numerosos Patriotas nabarros, estoy convencido de la necesidad obligada de tender puentes entre aquellos nabarros que queremos de forma verdadera, recuperar la libertad mediante la recuperación de la plena soberanía de nuestro Estado, Nabarra. Una soberanía que nos fue arrebatada por la fuerza de las armas y que a día de hoy, por desgracia para nuestro interés libertario, continúa retenida por las políticas imperialistas de las metrópolis colonizadoras española y francesa.
Desde los diferentes agentes políticos existentes en la actualidad en nuestro País, escuchamos últimamente permanentes arreglas independentistas y soberanistas. Pero tristemente debemos recordar que este discurso libertario no es realizado por todos, e incluso para más INRI, muchas veces dichos manifiesto calificable de poseer un alto carácter patriótico, son totalmente contrariados a continuación por las posteriores acciones desarrolladas por dichos agentes, que indudablemente legitiman de manera prolongada la brutal esclavitud del Pueblo Nabarro.
Palpablemente y en muchos casos-dejando de lado de una forma consciente e intimada el planteamiento ideológico y político para la estructuración Estatal futura de nuestro Estado de Nabarra-la división constate y partidista es debida a unos planteamientos terciarios, pues muchos de ellos, por no decir la absoluta mayoría de esos agentes políticos, anteponen sus diferentes ideologías, que van desde la conservadora hasta la progresista, por encima del ineludible primer paso necesario para alcanzar de nuevo la independencia de este Pueblo, que no es otro más que la necesaria unidad por el bien de nuestra Patria Nabarra.
Todos nosotros, si es que ciertamente queremos recuperar o restaurar la plena soberanía del Estado de Nabarra, debemos colocarnos frente al espejo y realizar una profunda autocrítica interior de nuestros actos políticos pasados, para así, una vez reconocidos los errores y también, por supuesto, los aciertos pasados, poder asistir ante nuestros compatriotas con la lección aprendida. Este simple y sencillo ejercicio también lo deben hacer todos aquellos grupos políticos que gritan independencia y soberanía. Se obligan con ese discurso a analizar con seriedad todas sus acciones pasadas, por supuesto teniendo que reconocer sus errores, comprometiéndose y forzándose a no repetirlos, a la vez de potenciar en la práctica su acertado mensaje.
Esta actuación no debe quedarse solo en ello, sino que nosotros, todos, somos los que nos tenemos que encargar de limar pasadas asperezas, ciertamente estúpidas, con nuestros compatriotas y estimular un Frente Patriótico Nabarro, bajo una clara unidad Nacional y por supuesto, sin dejarse arrastrar a la política electoral impositiva española y francesa, ya que con ella seguiríamos repitiendo el grave error de legitimar nuestra esclavitud, al mostrarnos obedientes, colonizados y sumisos a los designios imperialistas español y francés.
Este Frente Patriótico Nabarro debe tener exclusivamente un carácter político Estatal, que de sentido y orientación a las legítimas manifestaciones del espíritu democrático del Pueblo Nabarro, en el actual momento histórico que estamos viviendo. Pero claro está, teniendo muy presente que jamás deberá convertirse dicho F.P.N. en partido político-aceptando con ese necio paso las impositivas Constituciones española y/o francesa-o en apéndices de algún agente político en particular, bien sea esta de izquierdas, del centro o de derechas. La fuerza moral y cívica del F.P.N., debe de residir en su total independencia, esta maravillosa condición para servir realmente como un punto o lugar de encuentro, de reflexión y de acción conjunta de todos los Patriotas nabarros, sin importar su ideología personal o partidista.
Con ello, la Nación Nabarra tendrá por fin en sus manos una nueva forma de poder socio-político verdaderamente propio que debe exteriorizarse a lo largo y ancho de todos los territorios del Estado de Nabarra. Al mismo tiempo, ese poder que nos otorgaría el F.P.N., no debe mantenerse desperdigado o disperso, sino coordinado. Ha llegado el momento de construir las estructuras necesarias de lucha y dirección, que articulen y apuntalen ese poder que reside a ciencia cierta en la Nación Nabarra.
Aquellos que no han entiendo aún lo que ha sucedido a lo largo de nuestro pasado histórico-político, insisten erróneamente en dejarlo todo en manos de la continua espontaneidad, renegando a su vez de cualquier forma de coherencia y dirección, ciertamente necesaria para la acción Patriótica conjunta, que incluso en un futuro más o menos próximo, nos puede servir de puente hacia la consolidación de un auténtico Gobierno Independiente y Soberano de Nabarra.
